Estados como Kentucky, Missouri y Mississippi han sufrido devastadores y mortales tornados durante este fin de semana. Estas comunidades destruidas en estados con mayoría republicana están sufriendo en carne propia los fuertes recortes del gobierno de Donald Trump a agencias como FEMA -Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (sigla en inglés)- que protegía a la nación contra todo tipo de riesgos y desastres naturales.
Esta agencia,
al menos hasta la llegada de Trump al poder en Washington, protegía muy seriamente a la población, especialmente frente a desastres como inundaciones, terremotos, tornados, huracanes y
emergencias nacionales. La Agencia ofrecía un programa de recuperación para
individuos y negocios en caso de una tragedia como las actuales. Ahora el presidente permanece en
silencio tras los trágicos acontecimientos.
Varios estados en el centro de Estados Unidos han sido azotados desde la semana pasada por tornados y violentas tormentas que han dejado decenas de muertos, heridos y una estela de destrucción que causó miles de millones de dólares en pérdidas materiales.
Pese a la cantidad de días que lleva el azote de diferentes sistemas de tormentas, el presidente Trump, que estuvo dedicado a su visita al Medio Oriente la semana pasada, no se ha expresado sobre el desastre que ha dejado al menos 28 personas fallecidas durante el fin de semana por tormentas severas, lo que ha puesto nuevamente bajo la lupa los recortes de Trump en áreas clave para la preparación y respuesta ante desastres naturales.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario