La ceremonia que formalizó la puesta a disposición de la ONU de la Fuerza de Paz binacional "Cruz del Sur" |
Ante la presencia del secretario general de la Organización de las Naciones Uniadas, Ban Ki moon, Chile y Argentina formalizaron en Buenos Aires el ingreso de la Fuerza de Paz Combinada Cruz del Sur, compuesta por miembros de las Fuerzas Armadas de ambos países al Sistema de Fuerzas de Reserva del organismo internacional.
La ceremonia se realizó en el Centro Argentino de Entrenamiento para Operaciones de Paz (CAECOPAZ), ubicado en Campo de Mayo en la capital argentina con la participación de los ministros de defensa de Chile, Andrés Allamand, y de Argentina, Arturo Puricelli, ocasión en que ambos firmaron el Memorando de Entendimiento que formaliza la puesta a disposición de Naciones Unidas de la Fuerza de Paz binacional “Cruz del Sur” a partir del 2012.
Esta unidad es un esfuerzo inédito de cooperación militar chileno-argentina que estará en condiciones de ser desplegada en los escenarios conflictivos del mundo donde la ONU requiera mantener la paz y garantizar la estabilidad, con el acuerdo previo de los respectivos gobiernos.
Con esta fuerza combinada, Argentina y Chile no sólo elevan significativamente sus niveles de cooperación militar -promoviendo, por ende, una mayor confianza entre los miembros de sus FFAA-, sino que potencian su imagen internacional como países comprometidos con la seguridad mundial. Lo que se pretende, según ratificaron ayer ambos ministros de Defensa, es que los dos vecinos sean "exportadores de la paz".
La iniciativa es coherente tanto con la vocación de Chile de abrirse al mundo y participar como actor responsable en el orden internacional como con su interés por promover mecanismos de integración y estrechar vínculos con un socio estratégico como Argentina, incluyendo el ámbito militar.
El ministro de defensa chileno Andrés Allamand, declaró durante la ceremonia que “Chile entiende que la globalización es una fuente de oportunidades para promover sus intereses e impulsar principios comunes con otras naciones", pero dichas oportunidades "llevan aparejadas responsabilidades. Una de ellas es contribuir a mantener la estabilidad, la seguridad y la paz internacionales". Para Chile, entonces, la participación en misiones de paz constituye "una herramienta de su política exterior y parte integral de la política de defensa". La participación chilena desde 2004 en la misión de paz de la ONU en Haití -más allá del necesario debate sobre la forma en que ha evolucionado ese esfuerzo y la necesidad de reenfocarlo- es un ejemplo de esa definición estratégica.
El hecho es significativo porque hace 33 años ambos países estuvieron muy cerca de entrar en guerra a propósito de la posesión de las islas del Canal del Beagle y únicamente la intervención del Vaticano impidió que estallara un conflicto que, sin duda, marcaría hasta hoy la relación bilateral, comentó editorialmente hoy el diario “La Tercera”. La cooperación de efectivos del Ejército, la Fuerza Aérea y la Armada de ambos países en una fuerza de paz de este tipo es una potente señal de confianza mutua, lo cual es un valioso activo que se proyecta a otros ámbitos de la relación bilateral, agregó el diario.
Esta fuerza combinada, como han recalcado los gobiernos de Chile y Argentina, es un esfuerzo de integración sin precedentes en nuestra región, y un recordatorio de los beneficios asociados a las relaciones vecinales que se construyen sobre la base del diálogo, la cooperación y la confianza. El aporte que podrá realizar la Fuerza Combinada Cruz del Sur en tareas de mantención de paz, entrega de ayuda humanitaria, y creación de áreas protegidas en distintas partes del mundo, entre otras misiones, contribuirá tanto al prestigio de Chile y Argentina como miembros responsables de la comunidad internacional, como a cimentar aún más la relación entre ambos vecinos, dice el comentario editorial.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario