KRADIARIO

LOS HÁBITOS DE LOS ADOLESCENTES EN EL DÍA DE HOY

Por Jessika Krohne
www.psicologiaglobal.cl

Qué diferente era la vida hace algunas décadas, donde los niños y los jóvenes se entretenían con cosas simples, jugando en la calle o en sus casas con juegos creados por ellos mismos o simplemente leyendo un libro.

Hoy, los jóvenes ya no se imaginan una vida sin celular, videojuegos y televisión o realizar actividades costosas, como ir a conciertos, cines u otros pasatiempos que están muy lejos de los antiguos paseos familiares o los picnics que realizaban familias enteras a la orilla de un lago o en un parque.

¿Qué responsabilidad tenemos nosotros, los adultos con la generación que estamos formando que son totalmente pro televisión y anti lectura?

Me pregunto qué irá ser de ellos en el futuro y como van a enfrentar la vida en su adultez, cuando tengan que resolver un problema en su trabajo y ser creativos para modificar una situación. Difícil ser creativos, si todos se los damos a nuestros hijos en bandejas y les facilitamos la vida absolutamente.

Todos los que vivimos en una relación de pareja sabemos, lo importante que es tener una comunicación fluida dentro de ésta y veo a los jóvenes de hoy y me pregunto ¿cómo van a poder tener nuestros hijos una relación de pareja satisfactoria a futuro si la comunicación cara a cara está desapareciendo totalmente de sus rutinas diarias? La comunicación cara a cara significa estar presente y prestar atención e interés por el otro y mostrar una comunicación no verbal. Que podemos hacer nosotros los padres para impedir a nuestros hijos su forma de comunicación a través de mensajería y enseñarles que la otra forma de comunicarse más tradicional es mucho más enriquecedora.

Otro tema es la lectura. Cada día se ven menos niños y adolescentes leyendo y los colegios cada vez fomentan menos este hábito tan saludable. El otro día apareció en el diario El Mercurio que solo a un 18,9% de los adultos les gustaba leer. Cifra bastante baja, si pensamos que somos nosotros los que tenemos que transmitirles este hábito a nuestros hijos. La lectura fomenta la creatividad, la fantasía, las ilusiones y ayuda a sentirse más satisfecha consigo misma. ¿Por qué no retomar este hábito tan saludable que ha sido dejado totalmente de lado para priorizar los elementos electrónicos como los videojuegos y la televisión? Refiriéndonos a este último hábito, leí hoy un estudio que revelaba que la actividad de ver televisión está directamente relacionada con la obesidad en los adolescentes.

Durante 2012, la revista médica Archives of Pediatrics & Adolescent Medicine reportó que por cada hora que los niños y adolescentes pasan mirando televisión, estos son un 8% menos propensos a comer frutas, y están un 18% más predispuestos a consumir dulces y un 16% a preferir la comida rápida. Además, aquellos que ven más tiempo televisión son menos activos y más proclives a la obesidad.

Ahora, que estamos justo en la época de las vacaciones estivales, ¿no sería un buen ejercicio desconectar el celular y olvidarse un poco de la tecnología? Empecemos nosotros, los padres a dar el ejemplo. Todos deberíamos realizar este ejercicio y dejar el celular de lado, para darle un ejemplo a nuestros hijos y éstos también puedan experimentar algo de la vida que vivimos nosotros hace 20 años, donde estos aparatitos eran desconocidos y las vacaciones eran tan o más entretenidas que las que vivenciamos hoy día. Otra recomendación para los padres es llevar un libro a las vacaciones para que les mostremos a nuestros hijos que la lectura puede ser muy cautivadora y entretenida.

Hagamos el esfuerzo por nuestros hijos, pero también por nosotros mismos, que daríamos todos por ver a futuro a nuestros hijos felices con su propia vida y con herramientas para defenderse de los obstáculos que la vida les pondrá a diario en su camino.