Casi increíble pero cierto: Chile, el país más sísmico del mundo, sigue estando muy atrasado en cuanto a tecnología moderna y adecuada para detectar movimientos telúricos y evaluar la magnitud de ellos, a pesar que las autoridades centrales expresaron tras el terremoto del 27 de febrero de 2010 la intención de renovar los equipos obsoletos por nuevos, lo que no ha sido así.
Tras el sismo ocurrido en Chile ayer se dieron a conocer distintas mediciones del mismo pasando de 5,8 grados Richter a 6,4, 6,8 y esta mañana la Oficina Nacional de Emergencia (ONEMI) habló de 7 grados de magnitud. Esta medición sigue siendo corregida y es posible que cambie en las próximas horas o días.
La prensa local entrevistó sobre este complicado tema al sismólogo de la Universidad de Chile, Javier Ruiz, quien reconoció que "algunos instrumentos que forman parte de la red corresponden a la década de los 80", por lo que ya se consideran muy antiguos.
Ruiz afirmó que "dentro de la red en Chile se trabaja con distintas magnitudes, siendo las más frecuentes la local y la del momento sísmico, que es la que en realidad entrega el punto de vista más científico y real".
La red sismológica de la Universidad de Chile trabaja en primer lugar, y para entregar en menos minutos la información, con la magnitud local, que corresponde a los datos que facilitan los instrumentos más cercanos al movimiento telúrico, "pero que de seguro estarán sujetos a cambios, debido a la cercanía, además si el sismo es muy fuerte, los instrumentos pueden saturarse", dijo Ruiz al diario La Tercera.
A medida que se van tomando en cuenta los datos del instrumental más lejano, se va llegando a la cifra final y más real.
Por otro lado, en cuanto al funcionamiento de Estados Unidos, Ruiz indica que ellos no dieron una medida instrumental, sino que "lo que hacen es una magnitud estimativa por la duración y después de alrededor de una media hora, se entrega la magnitud instrumental, por eso al principio dieron un 7,2 y después un 7,1", explicó.
"pero otros sí, sin embargo, si el sismo es grande se saturan".
Por otro lado, "hay otros que no se saturan, pero es mucho más delicado poder sacar la información", acotó Ruiz.
La Onemi espera instalar 65 nuevos sismógrafos durante 2012, los que serán operados por universidades nacionales. De éstos, ya hay diez equipos que fueron instalados a fines del año pasado.
Por otra parte, está en plena discusión si la alerta de tsunami dada ayer fue correcta o equivocada. El director del Centro de Estudios Oceánicos de la Universidad Andrés Bello, Alfonso Campusano , señaló que la alerta "fue completamente mal dada, ya que con la información que había disponible sobre las características del movimiento telúrico se generó temor en la población".
Por otra parte, la sismóloga de la Universidad de Santiago, Paulina González, recordó que "faltan instrumentos que permitan medir la variación del mar cuando ocurre un temblor, para poder precisar si ocurrirá o no un tsunami".
Quienes pudieron ver "con sus propios ojos" el mar, en la VII Región, poseen versiones encontradas con lo señalado por las autoridades para justificar la evacuación preventiva de anoche. El capitán de puerto de Constitución, Andrés González , afirmó que el mar se encontraba "completamente normal" y agregó que el alcalde de mar de la Caleta de Duao, Héctor Silva, "nunca dijo que el mar estaba recogiéndose"... que la alarma fue a causa de un "rumor".
"Lo que había en Iloca era una condición de baja mar, que es una condición normal. La comunidad con su ojo no técnico y desconociendo el efecto de marea baja, miró el mar y pensó que se estaba recogiendo. Pero no fue así", añadió.
Asimismo señaló se comunicaron con el director regional de la Onemi -"entre las 21:30 y 22:00 horas"- para informarle que "no tuvimos ninguna variación del mar anormal y que lo que sucedió en Iloca se debía a la baja mar".
En la misma línea, el alcalde de Licantén, Héctor Quiero, aclaró que todo comenzó "porque gente comenzó a llamar a una radio diciendo que el mar se estaba recogiendo 40 metros, lo que era totalmente falso". El edil aseguró que él estuvo en terreno justo minutos después de sucedido el sismo, acompañado de carabineros, bomberos y pescadores de la zona y que "nunca hubo recogimiento... inclusive el mar estaba pegando en las rocas".
Balance del sismo
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La Onemi entregó un balance que registra un anciano muerto (fallecido en la ciudad de Parral como consecuencia de un infarto en medio del sismo), 14 lesionados y 24.283 evacuados entre las Regiones de Valparaíso y el Biobío. Los daños materiales son también numerosos en distintos comercios de la zona afectada.
Respecto de las evacuaciones en zonas costeras a partir de las ordenes, primero desde el nivel central entre Concón y Lebu, y luego a nivel local en el Maule, 14.320 personas corresponden a la Región del Biobío, 9.360 a la Región del Maule, 400 a la Región de O´Higgins y 203 a la Región de Valparaíso.
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