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viernes, 15 de noviembre de 2013

15-11-13-KRADIARIO-878

LA TESIS DEL 32% ELECTORAL,  DESDE LA IZQUIERDA

Por Hugo Latorre Fuenzalida.

Marcel Claude había lanzado la idea no materializada de unir en una sola candidatura las postulaciones de izquierda. Estas incluían al propio Marcel Claude, a Roxana Miranda, a Enriquez Ominami y Alfredo Sfeir. En conjunto podrían haber sumado un 32% de los votos. Esto hubiese impuesto  un reparto más o menos optimista con  un aproximado de 12% para MEO, 10% a Marcel Claude y otro 10% entre Roxana y Sfeir.
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Como dice el  diario “Clarín”, son los confiables, los que desean sinceramente los cambios, los que están por una Constituyente, por una educación gratuita, por eliminar el binominal y por  una democracia social y popular para Chile.
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Claro que una opción así hubiese implicado una concurrencia masiva del voto voluntario no tradicional y una concurrencia morigerada del voto convencional.
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Especulando: ¿Qué pasaría con una fuerza electoral de la izquierda de esta magnitud?

Indudablemente la izquierda  habría obtenido la más alta cuota electoral desde la vuelta a la democracia y eso significaría que estos grupos estarían obligados a unirse en un solo gran movimiento, una especie de “nueva izquierda”, pues su peso electoral sería por primera vez gravitante en el país; tan gravitante que entraríamos nuevamente a la histórica proporción de los tres tercios, superando el duopolio.
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MEO logró un 20% en las pasadas elecciones presidenciales, y el descontento con el sistema, luego de los movimientos del 2011, se ha hecho más explícito, lo que hace imaginable una cifra cercana al 30% en los sectores “antisistema”. Claro que todo depende de quiénes y cuántos se levanten a votar el día 17 de noviembre.
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Si la deserción se incrementa  fuertemente en la derecha y el electorado de la “Nueva Mayoría” se mantiene dentro de los márgenes de lo histórico, en volumen de votos, la izquierda podría sumar una porción interesante; pero si el incremento es parejo en todos los sectores- o si también lo es la reducción- , entonces la sumatoria de la izquierda andará, nuevamente más cercana al 20% que al 30%.
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En perspectiva
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Esta “Nueva Izquierda”, incluso si se aproximara al 20% implicaría una fuerza consolidada de un electorado “antisistema” vigoroso y prometedor. Vigoroso porque tendría una organización política emergente y plural, aunque programáticamente coherente; prometedor, porque tendría a todas las organizaciones sociales   como base de apoyo, cosa que los partidos tradicionales se las han enajenado, debido a sus prácticas cupulares y anti populares.
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Es decir, la “Nueva Izquierda” sería un “estrella naciente” en política, mientras que la “Nueva mayoría” sería como el último relumbrón de una supernova en extinción.
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Basta sumar dos más dos para darse cuenta de la ambivalencia del la “Nueva Mayoría”. Ambivalencia de la que no podrá escapar y de la que será prisionera apenas inicie su mandato. La calle pedirá cambios que la “Nueva Mayoría” sólo podrá poner a consideración del Congreso. Es cierto que si hay doblajes se tendrá mayoría como para realizar varios cambios fundamentales, pero lo que no se tiene en cuenta es que al interior de los parlamentarios de la “Nueva Mayoría” hay varios de tinte conservador que podrán restarse a los cambios más significativos. Por otra parte, no es misterio que una reforma tributaria que recaude 3.000 millones de dólares, no cubre ni lo elemental para iniciar los cambios que se requieren.
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Tampoco se debe olvidar que Asia ha entrado en un proceso de crecimiento más lento y que Europa recaerá, junto con EE.UU., en un clima de inestabilidad. Todo lo anterior hará que Chile sea afectado en los precios de sus materias primas, las que han sido la plataforma sobre la que flota nuestra economía.
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Si la crisis mundial se profundiza en el primer semestre del 2014 (cosa bastante posible dado la proyección de crecimiento de China), entonces las reformas tributarias en Chile serán del mínimo minimorum, lo que cierra las puertas a los cambios prometidos por Michelle Bachelet, por difusos  y poco concretos que hayan sido.

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