25-11-13-KRADIARIO-880
La columna de psicología social y famliar de los lunes
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¿CÓMO SUPERAR LA INSEGURIDAD?
Por Jessika Krohne
www.psicologiaglobal.cl
Hombres
y mujeres jóvenes llegan a la consulta con el motivo de sentirse
inseguros en el momento de enfrentar diferentes situaciones en la vida
cotidiana. Cuentan de situaciones laborales por ejemplo, donde ellos no logran
plantear sus ideas o imponer sus peticiones. En la vida cotidiana se puede
percibir esto en las relaciones de pareja o de amigos, donde muchas veces el
afectado calla por miedo a que su planteamiento no sea bien visto.
Vivimos
en una sociedad llena de normas y reglas culturales impuestas por nuestros
pares y nosotros mismos. Tenemos que ser de cierta manera, tenemos que cumplir
con aquellos deberes, si no, nos miran como bichos raros. Actuamos muchas veces
como robots frente a la sociedad. Especialmente si pertenecemos a una clase
social acomodada. Vamos a un colegio específico, porque solo ese es el que
aparece en los niveles superiores de los rankings nacionales de los mejores
colegios. Después enviamos a nuestros hijos a colegios de similar prestigio.
Estudiamos en la universidad de todas maneras e idealmente en una universidad de
renombre. Después tenemos que ingresar a un buen puesto de trabajo, comprarnos
una propiedad en un determinado cuadrante de la ciudad que con suerte abarca
una pequeña parte de máximo tres comunas. Obviamente tenemos que casarnos,
todavía es bien visto hacerlo con una ceremonia eclesiástica y después no
demorarnos mucho en tener hijos, idealmente dos o tres, pero tampoco más, ya
que eso sería multitud. Si alcanzamos, es bien visto tener estudios en el
extranjero o por lo menos un máster en una importante universidad chilena.
Somos
unos robots de nuestra sociedad y lo peor...todos caemos en eso...en estas
normas o leyes que impone la sociedad en la que vivimos........y que nos invade
de una inseguridad enorme.
La
inseguridad y desconfianza que sentimos hacia nosotros mismos, nos impiden en
muchas ocasiones llevar a cabo proyectos o acciones que son importantes para
nosotros, o nos provocan un excesivo estrés a la hora de realizarlos. En
cualquier caso, nos suelen dejar con sentimientos de tristeza, arrepentimiento
o mediocridad.
Por debajo de esta inseguridad suele haber un
miedo, bien sea a no ser lo suficientemente bueno, a no tener suficiente, a
estar solo o a quedarse solo… y con el fin de no enfrentarnos a esos miedos lo
que hacemos es intentar controlar las circunstancias externas y así crear el
tan deseado sentimiento de seguridad.
De esta forma, buscamos la aprobación de los
demás para convencernos de que lo que hemos hecho está bien. Esta aprobación la
encontramos siguiendo al pie de la letra las normas que impone nuestra
sociedad. Inmersos en esta forma de actuar, nos esforzamos en agradar a la
gente a nuestro alrededor y en mantener las cosas tal y como están.
De lo que no nos damos cuenta es que cuando
ponemos nuestra seguridad en manos de aquello que no controlamos, como la
opinión de los demás, la economía, etc, hacemos que ésta dependa de factores
externos que siempre pueden cambiar, avivando así el sentimiento de inseguridad
interno.
Para poder superar nuestra inseguridad, es
necesario confiar más en uno mismo y enfrentar nuestros miedos. Cuando sentimos
miedos, es importante detenernos, mirarnos a nosotros mismos y analizar de
donde viene el miedo, como surgió y se originó. Con esas respuestas se logra entender
esa situación y superarlo más fácilmente.
También es necesario disminuir nuestras
necesidades, es decir, tener menos objetivos altos en la vida y tal vez
inalcanzables. En la economía actual se crean necesidades artificiales que la mantienen y la hacen crecer. Es
importante ser conscientes de que éstas no son necesidades vitales y que aunque
tenerlas puede ofrecer una cierta satisfacción puntual, no son necesarias para
vivir y mucho menos para ser feliz.
También es importante mantener nuestra mente activa y abierta al cambio. Con el fin de ser buenos en algo y de hacerlo perfecto tendemos a especializarnos y cerrar nuestra mente a otras cosas que existen a nuestro alrededor. De esta forma, cuando algo nuevo aparece en nuestras vidas, tendemos a rechazarlo y a resistirnos a ello. No creemos que podamos aprender algo nuevo, o por lo menos no al mismo nivel en el que lo hacíamos anteriormente, y representa un reto que nos incomoda. Es por eso hay que atreverse y no tener miedo de enfrentar nuevos desafíos.
Tratemos
además de ser siempre uno mismo y no pretender ser alguien distinto. Eso nos pone en una situación muy delicada en la que sentimos que en cualquier
momento alguien se va a dar cuenta de cómo somos en realidad. De ahí la
importancia de mostrarnos siempre de forma auténtica y aceptarnos como somos,
con nuestras fortalezas y debilidades.
A
modo de conclusión, me gustaría agregar que la verdadera seguridad
reside en el conocimiento de saber que, pase lo que pase, contamos con los
recursos internos necesarios que nos ayudarán a seguir adelante y a afrontar
todos aquellos cambios inesperados que puedan surgir en nuestras vidas.
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