KRADIARIO

IGLESIA

¿SALDRÁ HUMO BLANCO MAÑANA EN EL VATICANO?

Ya se encuentra todo listo y dispuesto para que comiencen mañana las votaciones del Cónclave que elegirá al nuevo Papa en reemplazo del renunciado Benedicto XVI.

Según informó el vocero de la Santa Sede, Federico Lombardi, en declaraciones difundidas por TVN 24 Horas de Chile, los cardenales se desplazarán mañana martes de la Casa de Santa Marta a la Capilla Paolina. Luego, a las 12.30 irán en procesión desde la Capilla Paolina a la Sixtina.

Quince minutos después, pronunciarán el juramento solemne de secreto, después del cual, el conocido como "ceremoniere" (maestro de ceremonias pontificias), monseñor Guido Marini, pronunciará el célebre "extra omnes" ("todos fuera") y se procederá a cerrar "con llave" (de ahí el término "cónclave") la Sixtina.
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Con este simbólico acto se pretende dejar claro que queda fuera de la sala todas las "pequeñeces" mundanas y entra el Espíritu Santo, el encargado según la tradición católica de iluminar a los purpurados sobre quién debe ser el próximo Sumo Pontífice.

Tras eso, los purpurados escucharán la meditación del cardenal Prosper Grech y después procederán a la primera votación.

Para el día miércoles, si la elección no se produce el martes 12 de marzo, los purpurados comenzarán la jornada bastante más temprano. Se estima que a las 5.30 de la mañana, los cardenales vuelvan a ingresar a la Capilla Sixtina. Allí rezarán durante una hora y media y luego procederán a la votación.

Tras un almuerzo, los cardenales retornarán al mediodía a la Capilla Sixtina para votar en el cónclave. Allí estarán hasta las 15 horas.

Respecto al esperado "humo blanco", Lombardi señaló que "se producen con la quema de las papeletas de la votación final de la mañana o de la tarde, es decir alrededor de las 8:00 horas en el primer caso y de las 15:00 horas en el segundo. Si la elección se produjese en una votación intermedia, la fumata saldría a mitad de la mañana o de la tarde".

Candidatos nuevos

En 2005, el adversario número uno del favorito Joseph Ratzinger fue Jorge Mario Bergoglio. El Arzobispo de Buenos Aires habría quedado segundo. Hoy tiene 76 años y su elección no parece probable, debido a su edad avanzada. Tras la renuncia de Benedicto XVI por “falta de vigor”, es normal que los cardenales busquen a un hombre más joven que pueda reinar muchos años. Sin embargo, no se trata sólo de tener fuerza física, sino también de capacidad de gobierno y determinación. Paolo Rodari, vaticanista de La Repubblica, cuenta que “al final de una congregación, algunos purpurados comentaron entre ellos: “Bastaría con cuatro años de Bergoglio para cambiar la situación”. Resume Rodari: “Bergoglio está manteniendo un papel en segundo plano. Pero aún no se siente relegado”. El duelo este año podría enfrentar, al menos en los primeros escrutinios, al italiano  Angelo Scola y al brasileño Odilo Scherer.

Otros candidatos serían el arzobispo húngaro de Budapest, Peter Erdó, y Marc Quellet de Canadá. En esta elección, por primera vez en la historia, el continente americano tiene posibilidades reales de un Papa. El nuevo Papa debe ser elegido con los dos tercios de los votos.

El hombre que va a liderar a los 1200 millones de católicos que hay en el mundo será elegido por 115 cardenales menores de 80 años. Antes de la elección los prelados deberán ponerse de acbuerdo en cómo gobernar la Iglesia, sobre lo cual no existe una unamidad de opiniones entre los cardenales.

Aparte de los escándalos de pedofilia y corrupción, uno de los grandes problemas de la Iglesia Católica es el de la escasez de sacerdotes. Según El Mercurio, en el Primer Mundo hay parroquias que están vacías y en el Tercer Mundo hay párrocos que tienen que ocuparse de veinte parroquias en el campo o en la montaña. El otro gran tema es el papel futuro que debe cumplir la mujer en la Iglesia.

Los vatileaks

Hace un año, empezaron a circular en la prensa italiana documentos reservados al Papa que revelaban disputas dentro de la Curia Romana, aquel aparato de Congregaciones (ministerios con cartera) y Pontificios consejos (sin cartera) que gobiernan a la Iglesia. En los papeles, que fueron robados del departamento de Benedicto XVI por su mayordomo Paolo Gabriele, se aprecia el enfrentamiento de clérigos con el Secretario de Estado vaticano Tarcisio Bertone. La filtración fue bautizada como Vatileaks.

El mismo vocero Federico Lombardi admitió que muchos sienten la urgencia de reformar la curia. Se crearon dos grandes corrientes contrapuestas: los curiales que quieren mantener la centralidad de Roma en la toma de decisiones y los reformadores que piden colegialidad entre centro y Conferencias Episcopales.

 Los primeros son sobre todo italianos, pero no solo: por ejemplo, el brasileño Scherer es uno de ellos, ya que pertenece a la Comisión que vigila el Banco Vaticano y trabajó en la congregación que nombra a los obispos. Los segundos no son tan unidos, pero un zócalo duro es constituido por los norteamericanos. Podrían converger sobre Angelo Scola, arzobispo de Milán, italiano, pero externo a la curia. Los 11 electores de EE UU Quieren elegir a un hombre alternativo al “partido romano”, alguien que sepa hacer limpieza y apostar por la transparencia.