UNIVERSIDAD DEL MAR: EL 48% DE LOS EGRESADOS DE MEDICINA REPROBÓ EL EUNACOM EN 2010, EXAMEN QUE ES REQUISITO PARA QUE UN MÉDICO PUEDA ATENDER EN EL SISTEMA PÚBLICO DE SALUD
Una grave denuncia respecto del bajo nivel de preparación con que egresan los médicos de la Universidad del Mar, realizó el ex decano de Medicina de dicha casa de estudios, doctor Francisco Acevedo (derecha), asegurando que “no han asistido nunca a un parto ni a una actividad quirúrgica mayor”.
Acevedo aceptó el cargo en 2003 con la misión de crear la Facultad de Medicina de la institución privada, sin embargo en 2007 presentó su renuncia, frustrado por el escaso apoyo económico que le habrían brindado las autoridades universitarias, sumado a la indolecia frente a las malas evaluaciones obtenidas por sus egresados.
Ya en aquel entonces, el médico había cuestionado el hecho públicamente a través de una serie de cartas, además de denunciarlo a las entonces autoridades del Ministerio de Educación y el Consejo Nacional de Acreditación, las que se desentendieron del tema. Ahora, el caso se suma al escándalo por mal manejo financiero de la Universidad, revelado tras la renuncia del rector Raúl Urrutia.
Los problemas de la Universidad del Mar en el área salud son evidentes. En 2010, tras rendir el Examen Único Nacional de Conocimiento de Medicina (Eunacom), requisito para que un médico pueda atender en el sistema público de salud, el 48% de sus egresados reprobó el examen, lo que la convirtió en la peor escuela de Medicina del país. Según la denuncia del doctor Acevedo, él solicitó más recursos a las autoridades universitarias para mejorar la preparación de los alumnos, los que le fueron negados.
“(270 alumnos de ese entonces) pagaban cerca de $800 millones al año en aranceles, mientras la universidad gastaba en esa carrera cerca de $400 millones. Los otros $400 millones no sé a dónde iban”, asegura Acevedo en entrevista con Ciper Chile, agregando que incluso debió costear con sus propios recursos un viaje a Canadá en representación de la Universidad.
“(Los egresados) no han asistido nunca a un parto ni a una actividad quirúrgica mayor; no han tenido actividad académica práctica de oftalmología, dermatología, traumatología ni salud mental. (Eso se debe) a la falta de recursos. No se les dio la educación adecuada y eso es responsabilidad de la universidad. Con una buena preparación serían tan buenos como cualquiera”, acusa el médico, afirmando que uno de los dueños, Sergio Vera, le hizo ver que si los egresados aprobaban o reprobaban el Eunacom, era un asunto de ellos.
Pese a que quienes reprueban el examen no pueden trabajar en el sistema público ni recibir bonos Fonasa, estos médicos sí pueden ejercer la medicina en forma privada. “Sé a que a algunos los han contratado las empresas mineras, por ejemplo. Van como médicos generales a los campamentos. Ahí los contratan con un buen sueldo. Estos jóvenes van a cualquier parte, hay muchos que han salido fuera de Chile también”, indica Acevedo.
Consultado respecto a la actitud de las autoridades, el ex Decano indica que no fue escuchado cuando realizó las denuncias.
“El Ministerio de Educación estaba al tanto. Le mandé una carta a Marisol Barría, mi compañera de partido -soy socialista-, porque ella era ministra de Salud. No pasó nada. En la sesión de la Cámara de Diputados, cuando hice estas acusaciones, estaba presente el director de Educación Superior del Mineduc de esa época, Julio Castro. También estaba Eugenio Díaz (ex presidente de la CNA), al que ustedes (Ciper Chile) denunciaron por haber firmado un contrato con la Universidad del Mar. Todos miraban para el techo”.
Y aunque la respuesta de los dueños de la Universidad siempre se centró en que no existían recursos para mejorar la preparación, el doctor Acevedo en enfático en afirmar que estos sí existían.
“Vera contestaba que no había más recursos. La verdad es que sí había recursos, pero él decía que no. Yo los veía cambiar el auto Mercedes cada tres meses. Y a los otros no les iba mal. Héctor Zúñiga, que hace 25 años era el piloto de El Argonauta (un barco que hacía turismo en la bahía de Valparaíso), tiene ahora un palacio en un terreno de más de dos hectáreas en Reñaca. Zúñiga fue el rector durante mucho tiempo. Ninguno de ellos pueden decir que no hay plata”, concluyó.
Fuentes: Entrevista de CIPER Chile - y Radio Biobío
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