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jueves, 7 de junio de 2012

PRESIDENTA ARGENTINA
 PONE NUEVAS TRABAS A LAS IMPORTACIONES EN MEDIO DE UNA PROTESTA NACIONAL DEL AGRO Y DESCONTENTO GENERAL POR LA LIMITACIÓN EN LA VENTA DE DÓLARES   

La Presidenta argentina, Cristina Fernández anunció nuevas medidas proteccionistas para paliar el freno de la actividad económica y buscó dar sustento a las restricciones para la compra de dólares con un sorpresivo anuncio de que pesificará su fortuna personal de más de tres millones de dólares, como informa hoy Clarín de Buenos Aires.

Entre los anuncios dijo que a partir del 1° de julio, la importación de bienes de capital que provengan de fuera del Mercosur y se produzcan en la Argentina estará gravada con un arancel del 14 por ciento (antes tenía arancel cero). Incluso los bienes de capital que no se producen en el país pagarán un arancel de 2 por ciento.

Según explicó, la medida apunta a favorecer a los fabricantes de maquinaria agrícola, equipos de elevación y manipulación, motores, generadores, transformadores eléctricos, estructuras metálicas, maquinaria de uso especial y general, acoplados y remolques con plantas en 15 provincias argentinas.

La importación de bienes de capital, alcanzó el año pasado un volumen de unos 15.000 millones de dólares, sobre un total de compras al exterior por 74.000 millones de dólares.

Unos 40 países se quejaron en marzo ante la OMC por las trabas a las importaciones que ha impuesto Argentina. Esta semana, el país transandino aceptó dar explicaciones en el proceso de consultas abierto por la OMC.

“Dadas las circunstancias, no de Argentina sino del mundo, se hace imperioso sostener las políticas contracíclicas y aún acentuarlas”, aseguró la Presidenta, que también anunció la extensión hasta fin de año del régimen de beneficios para los productores nacionales de bienes de capital que vencía el 30 de este mes.

Protesta de productores rurales

Los productores rurales de Argentina iniciaron ayer una huelga comercial de siete días en protesta contra las políticas económicas del Gobierno de Cristina Fernández, especialmente hacia el agro.

Hasta el próximo martes los empresarios decidieron no comercializar granos, carnes y alimentos no perecibles en todo el país, como una forma de realizar "un llamado de atención", según explicó Hugo Biolcati, presidente de la Sociedad Rural Argentina.

La protesta fue lanzada por la denominada "mesa de enlace", que reúne a las cuatro mayores patronales del país.

Con esta medida ya son 10 las huelgas comerciales que el sector rural ha realizado desde que en marzo de 2008 estallara un severo conflicto con el Gobierno de Fernández por los derechos a las exportaciones de granos y otros productos agropecuarios, protestas que en ocasiones han incluido bloqueos de rutas.

Foto de Krohne Archiv

Los productores resolvieron este martes extender sus protestas a todo el país luego que el sábado pasado en Buenos Aires se iniciara otra huelga comercial de nueve días en protesta por el aumento de los impuestos en ese territorio.

Los empresarios acusaron al Gobierno de destruir "en los últimos seis años el mercado de trigo, estimando para la presente campaña una disminución en la intención de siembra del 48 por ciento, vislumbrándose el mismo efecto negativo en la comercialización del maíz y otras producciones agropecuarias", según detallaron en un comunicado.

La "mesa de enlace", también cuestiona la política oficial sobre el sector ganadero argentino, estimando que no se podrá cumplir con los compromisos de exportación de carnes de alta calidad hacia la Unión Europea.

Los productores aseguraron además que la rentabilidad del sector agropecuario "se ha visto disminuida significativamente en los últimos años", producto de "una inflación no reconocida por el Gobierno", que afecta los costes del campo y no se ve reflejada en la venta de su producción.

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