El Servicio Médico Legal confirmó que los restos de Salvador Allende exhumados en el Cementerio General el lunes pasado corresponden efectivamente al presidente chileno, lo que ha permitido comenzar los peritajes para establecer la verdadera causa de muerte del mandatario, los que se prolongarán por espacio de tres meses.
El juez Mario Carroza, a cargo de la investigación, entregó hoy este informe a la familia de Allende que estuvo a cargo del perito Edgar Rueda Guevara. El examen se logró a través de un análisis odontológico.
“Con base a la información disponible y la aplicación del método de comparación, se observa correspondencia plena de las características antemortem y postmorten analizadas, por lo que se puede confirmar que los restos analizados pertenecen al Sr. Salvador Allende Gossens", informó el magistrado a través de un comunicado.
Los peritajes que se hicieron a los restos óseos de Allende determinaron que éstos estaban íntegros, es decir, no hay pérdida de piezas pese a las inhumaciones y exhumaciones realizada en 1973 y 1990. Esto permitirá a los especialistas trabajar sin dificultades en las indagaciones de la causa de muerte.
Los análisis son desarrollados por siete expertos extranjeros y cinco chilenos, a petición del juez Mario Carroza.
Allende, según la versión de sus propios asesores y amigos, se suicidió con un fusil AK-47 regalado por el líder cubano Fidel Castro cuando defendió La Moneda del asalto de los militares.
La exhumación de Allende está inscrita en un esfuerzo de la Corte Suprema por investigar todas las violaciones de los derechos humanos cometidas en la dictadura militar liderada por Augusto Pinochet.
Allende, uno de los máximos líderes de la izquierda de América Latina, siempre dijo a sus cercanos que no se entregaría en caso de un golpe militar. "De aquí al cementerio", advirtió a sus ministros, informó la agencia dpa.
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