Las constructoras con edificios fallados
Equipo CIPER Marzo de 2010
En todo Chile son miles las familias que han quedado a la intemperie. No todas pueden culpar a la naturaleza. Porque al horror que emergió con el terremoto y el posterior tsunami, no son pocos los que hoy deben agregar la ira por haber quedado sin casa a causa de una construcción con serias deficiencias. Tras una recopilación de datos en todas las comunas del Gran Santiago, CIPER confirmó en terreno 23 edificios residenciales con daños severos y que ponen en riesgo a sus moradores.
La mayoría de estos inmuebles ya fueron evacuados y varios ya cuentan con decreto de inhabitabilidad. Mientras sus propietarios se preparan para una larga batalla legal contra los responsables de haber edificado y comercializado estos inmuebles con errores que expertos y los tribunales deberán dilucidar, CIPER presenta la nómina de las constructoras e inmobiliarias involucradas y los socios que participan en estas empresas.
Tras seis días de trabajo sin respiro, el jueves 4 de marzo los equipos de especialistas en cálculo estructural habían completado en la Región Metropolitana 2.338 inspecciones de inmuebles con daños de diversa consideración provocados por el terremoto que sacudió el país en la madrugada del sábado 27. Este balance preliminar, aportado por el Ministerio de Vivienda, indica que el 70% de los casos no presentaba fallas que ameritaran la evacuación. No obstante, un total de 480 inmuebles -20% del total- fueron declarados inhabitables.
El catastro incluye viviendas particulares, edificios residenciales, establecimientos educacionales, edificios comerciales y centros de salud. Muchas de las construcciones que colapsaron son edificaciones antiguas. Pero hay también estructuras recientes, las que no deberían haber registrado daños si -en teoría- los responsables de su construcción hubiesen cumplido con las normas antisísmicas.
Las imágenes de modernas torres colapsadas han generado indignación en la opinión pública, en especial tras las dramáticas escenas del rescate de las víctimas aplastadas por los escombros del edificio Alto Río de Concepción, cuyos 15 pisos fueron a dar al suelo antes de que la tierra dejará de temblar.
La responsabilidad de las empresas constructoras e inmobiliarias está ahora en el centro del debate público. También el relajamiento paulatino en la fiscalización que deben hacer las direcciones de obras municipales para autorizar desde el inicio de una construcción hasta su recepción definitiva. Un paso clave para garantizar la calidad de la vivienda y que terminó convirtiéndose en un trámite al despojarlas de autoridad real.
La nómina ingrata
Un rastreo hecho en terreno por CIPER en buena parte de las comunas del Gran Santiago, detectó 23 edificios residenciales con menos de 15 años -algunos aún tienen departamentos en venta- que registran daños de envergadura.
La cifra es aún mayor si se consideran diversos edificios comerciales severamente afectados.
La mayoría de los edificios residenciales ya fueron evacuados por sus moradores y sobre varios ya pende un decreto firmado por el alcalde respectivo. Las constructoras responsables de estas edificaciones son 18. Dos de ellas tienen tres de sus inmuebles en está nómina: Mujica y González Limitada (MIG) y FGS. Otra se inscribe en esta lista con un par de edificios: Sigro. Y entre las inmobiliarias que comercializaron estos inmuebles se cuentan algunas bien reconocidas en el mercado, como Penta y Simonetti.
Dos de las constructoras que integran este grupo -DPL e Ingevec- forman parte de un consorcio a cargo de edificar una de las obras emblemáticas del Bicentenario: el nuevo Cuartel General del Ejército, que se levantará en Avenida Blanco Encalada. Un dato que suena paradójico, si se toma en cuenta que uno de los edificios de DPL (la torre de 19 pisos Central Park, en Balmaceda 2150) corre el riesgo cierto de verse afectado por una orden de demolición debido a los graves daños estructurales que sufrió con el sismo del sábado 27.
En todo Chile son miles las familias que han quedado a la intemperie. No todas pueden culpar a la naturaleza. Porque al horror que emergió con el terremoto y el posterior tsunami, no son pocos los que hoy deben agregar la ira por haber quedado sin casa a causa de una construcción con serias deficiencias. Tras una recopilación de datos en todas las comunas del Gran Santiago, CIPER confirmó en terreno 23 edificios residenciales con daños severos y que ponen en riesgo a sus moradores.
La mayoría de estos inmuebles ya fueron evacuados y varios ya cuentan con decreto de inhabitabilidad. Mientras sus propietarios se preparan para una larga batalla legal contra los responsables de haber edificado y comercializado estos inmuebles con errores que expertos y los tribunales deberán dilucidar, CIPER presenta la nómina de las constructoras e inmobiliarias involucradas y los socios que participan en estas empresas.
Tras seis días de trabajo sin respiro, el jueves 4 de marzo los equipos de especialistas en cálculo estructural habían completado en la Región Metropolitana 2.338 inspecciones de inmuebles con daños de diversa consideración provocados por el terremoto que sacudió el país en la madrugada del sábado 27. Este balance preliminar, aportado por el Ministerio de Vivienda, indica que el 70% de los casos no presentaba fallas que ameritaran la evacuación. No obstante, un total de 480 inmuebles -20% del total- fueron declarados inhabitables.
El catastro incluye viviendas particulares, edificios residenciales, establecimientos educacionales, edificios comerciales y centros de salud. Muchas de las construcciones que colapsaron son edificaciones antiguas. Pero hay también estructuras recientes, las que no deberían haber registrado daños si -en teoría- los responsables de su construcción hubiesen cumplido con las normas antisísmicas.
Las imágenes de modernas torres colapsadas han generado indignación en la opinión pública, en especial tras las dramáticas escenas del rescate de las víctimas aplastadas por los escombros del edificio Alto Río de Concepción, cuyos 15 pisos fueron a dar al suelo antes de que la tierra dejará de temblar.
La responsabilidad de las empresas constructoras e inmobiliarias está ahora en el centro del debate público. También el relajamiento paulatino en la fiscalización que deben hacer las direcciones de obras municipales para autorizar desde el inicio de una construcción hasta su recepción definitiva. Un paso clave para garantizar la calidad de la vivienda y que terminó convirtiéndose en un trámite al despojarlas de autoridad real.
La nómina ingrata
Un rastreo hecho en terreno por CIPER en buena parte de las comunas del Gran Santiago, detectó 23 edificios residenciales con menos de 15 años -algunos aún tienen departamentos en venta- que registran daños de envergadura.
La cifra es aún mayor si se consideran diversos edificios comerciales severamente afectados.
La mayoría de los edificios residenciales ya fueron evacuados por sus moradores y sobre varios ya pende un decreto firmado por el alcalde respectivo. Las constructoras responsables de estas edificaciones son 18. Dos de ellas tienen tres de sus inmuebles en está nómina: Mujica y González Limitada (MIG) y FGS. Otra se inscribe en esta lista con un par de edificios: Sigro. Y entre las inmobiliarias que comercializaron estos inmuebles se cuentan algunas bien reconocidas en el mercado, como Penta y Simonetti.
Dos de las constructoras que integran este grupo -DPL e Ingevec- forman parte de un consorcio a cargo de edificar una de las obras emblemáticas del Bicentenario: el nuevo Cuartel General del Ejército, que se levantará en Avenida Blanco Encalada. Un dato que suena paradójico, si se toma en cuenta que uno de los edificios de DPL (la torre de 19 pisos Central Park, en Balmaceda 2150) corre el riesgo cierto de verse afectado por una orden de demolición debido a los graves daños estructurales que sufrió con el sismo del sábado 27.
En cuanto a la distribución geográfica de estas 23 construcciones recientes, las comunas con más edificios con daños severos son Ñuñoa, Huechuraba y Maipú, todas con cinco inmuebles. Le siguen Macul e Independencia con dos casos.
Mientras las empresas constructoras preparan el batallón de abogados que les permita sortear ante los tribunales el millonario pago de indemnizaciones que les serán reclamadas por los afectados, en algunos de estos inmuebles ya surgen las primeras estrategias para amagar la indignación. Ofrecen reparar las casas y departamentos y hasta pagar arriendos mientras dure este proceso, pero en algunos casos a condición de que los propietarios se desistan de toda acción judicial.
A continuación presentamos la identidad de los socios de las constructoras e inmobiliarias que edificaron y comercializaron inmuebles residenciales que ya están bajo inspección, a la espera de que se les declare reparables o sean demolidos. Está nómina probablemente irá cambiando en los próximos días y CIPER la actualizará permanentemente:
Paz Corp
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Edificio EmeraldDirección: Irarrázaval 2931/ Duble Almeyda 2942, Ñuñoa: Paz es un emblema del boom inmobiliario. Con 128 edificios que llevan su firma, la empresa se hizo famosa porque sus construcciones se multiplicaron por todo el centro de la capital durante la década pasada, captando con fuerza a una clase media emergente que quería mejorar su standard de vida. Como “el dueño de Santiago” calificaba en 2007 revista Qué Pasa al fundador de la compañía, Benjamín Paz, por ser el que más metros cuadrados había levantado en el centro de la capital, aprovechando el subsidio de 200 UF para viviendas nuevasLos negocios inmobiliarios de los Paz partieron en la década de los sesenta, pero fue en octubre de 2006 cuando dieron su gran paso y se abrieron a bolsa como Paz Corp. Poco meses antes se reestructuraban. Hasta entonces conocidos por las marcas Paz-Froimovich e Inverpaz, el 17 de marzo modifican Paz Construcción Limitada e ingresa a ella Paz Corp quien pasa a controlar su administración. En la misma fecha se modifica la sociedad Paz Gestión Limitada, ingresando el socio Paz Corp, se traspasan sus derechos sociales de Inversiones Britania Limitada a Paz Corp y ésta asume su administración. La misma modificación experimentan las sociedades Paz Inmobiliaria Limitada, la que aumenta su capital a $985.989.173; Paz Servicios Profesionales Limitada y Servicios Remaq Limitada. El 20 de septiembre de 2007 el capital de Paz Corp ascendía a $32.477.251.944, dividido en 192.134.400 acciones nominativas y de igual valor cada una. El 14 de septiembre de 2009 el capital de Paz Corp era de $53.266.388.362, dividido en 283.384.400 acciones nominativas. Entre sus representantes figuran: Ariel Moisés Magendzo Weinberger, Ricardo Alejandro Paz Daniels, Andrés David Paz Daniels, Ricardo Alejandro Paz Daniels.Características del inmueble: Son dos torres unidas por el subterráneo, estacionamiento y bodegas. La torre A tiene 20 pisos (incluyendo el quincho) y 170 departamentos; la B tiene 8 pisos y 60 departamentos. Aún se encuentra en venta el 30 % de los departamentos, aproximadamente.Valor de los departamentos: Desde 1.600 a 4.000 UF.Antigüedad: Un año y cuatro meses.Situación: Carabineros visitó el inmueble alertado por sus moradores y emitió una orden de acceso restringido hacia la torre más dañada (A), pero los habitantes desalojaron ambas de inmediato. Los vecinos se encuentran organizados, su vocero es Pedro Barahona quien informa que en el subterráneo, las murallas y pilares de la torre A se encuentran con daño estructural. Esta torre está ladeada y amenaza con caer encima de un edificio de la misma inmobiliaria, ubicado en Exequiel Fernández 55. La torre B no presenta daño estructural, pero si destrozos importantes en departamentos y espacios comunes. Paz Corp ofreció diversas soluciones, pero todos los propietarios optaron por una sola: abandonar el edificio y que se les devuelva el dinero ya invertido.
EBCO y Banmerchant
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Edificio calle Manuel SánchezDirección: Manuel Sánchez 3271, Macul. Usando los apellidos de sus socios Germán Luis Eguiguren Franke y Hernán Marcos Besomi Tomas se constituye en 1984 “Eguiguren-Besomi Construcciones Limitada”. En octubre 1997 se quedan sólo con las iniciales y crean la sociedad anónima EBCO, aportando un capital social de $100 millones en partes iguales. El archivo del Diario Oficial no registra ingreso o retiro de socios con posterioridad a esa fecha. El objeto de la sociedad es la construcción de “viviendas, edificios, locales comerciales, estacionamientos y las obras de cualquier naturaleza a que se refiere la Ley General de Urbanismo y Construcciones (…); las urbanizaciones y loteos que se hagan para instituciones fiscales, semifiscales, empresas autónomas u organismos de administración autónoma del Estado y Municipales y las que se hagan de acuerdo a proyectos aprobados por el Ministerio de Vivienda y Urbanismo”.Los mismos socios, además de Carlos Alberto Eguiguren Franke, son dueños de la sociedad Eguiguren Besomi Sanitarias Limitada, cuyo nombre de fantasía Ebsa Sanitarias Ltda., la que indica en su objeto social, entre otras cosas, “la planificación y ejecución de obras de urbanización, pavimentación, instalaciones sanitarias, eléctricas, de gas u otras”.De acuerdo al sitio web de la empresa, tienen otras 18 sociedades relacionadas y se encuentran desarrollando otros 14 proyectos inmobiliarios, como el edificio Nueva Vitacura, el edificio Bicentenario y los edificios Parque Mar de Antofagasta, entre otros.
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Actualmente sus socios son Julio Jaraquemada Ledoux, Enrique Huidobro Augier, Agustín Larraín Campbell, Marcelo Silva Rossi, Rafael Wilhelm Matthei y Francisco Walker Prieto. Uno de los proyectos más relevantes desarrollados por Banmerchant es la sociedad que constituyó con la Universidad San Sebastián para la construcción de un campus y tres torres de departementos en Bellavista.Inició sus actividades el 10 de septiembre de 1998 cuando la Junta extraordinaria de Accionistas de la Inmobiliaria Rancal S.A. decidió cambiar su razón social por Banmerchant S.A. y ampliar su rango de actividades (RUT 96.785.840-0). En diciembre de 2000 ingresa a BNF Ingeniería y Construcción Limitada, (BNF Constructora Ltda.), que posee un capital social de $350 millones, asociándose a Inversionista e Inmobiliaria Roca Limitada y a Felipe Eugenio Maturana Zamora. En julio de 2002, Inversiones BMC S.A. y Banmerchant S.A. constituyen la sociedad anónima cerrada Inmobiliaria Banmerchant con $ 18 millones de capital social, a través de la cual se relaciona con las sociedades Dual S.A. (diciembre 2002), Bancer S.A. (julio 2003). El 31 de diciembre de 2003 aumenta su capital a 228 millones y medio de pesos. El 2 de enero de 2006 nace Banmerchant Servicios Financieros S.A. con un capital de $ 10 millones, la que da paso en noviembre de 2009 a Inversiones y Rentas Universitarias S.A. en sociedad con Inversiones y Asesorías Doble L Limitada, Asesorías Muñoz y Holscher Limitada, Inversiones Cinco L Limitada.Arquitectos: REC Arquitectos, empresa creada en 1991 e integrada por Horacio Rodríguez Correa, Magdalena Errázuriz Domínguez y Felipe Errázuriz Domínguez.Características del inmueble: El edificio tiene 19 pisos y 152 departamentos.Valor de los departamentos: Desde 1.400 a 2.600 UF.Antigüedad: Dos años y cinco meses.Situación: La tarde de este martes 9 los vecinos recibieron el decreto de inhabitabilidad desde la municipalidad. Inicialmente Bomberos recomendó evacuar por posibles daños estructurales. El edificio presenta asentamiento de losas, fisuras ornamentales en los departamentos y los espacios comunes. El subterráneo tiene grietas en sus murallas y su techo se curvó. Según los ingenieros de la inmobiliaria el edificio no presenta fallas estructurales, por lo tanto no se harán cargo de sus daños.
Sigro y Viva
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Edificio Los Cerezos Dirección: Los Cerezos Nº 33, esquina Irarrázaval. Ñuñoa.Constructora Sigro: La sociedad inició sus actividades en 1982. Sus primeros socios fueron Carlos Alberto Vignau Martínez, Hernán Delorenzo Hachondo y Juan de Dios Palma Ortúzar, quienes aún integran el directorio de la compañía. En octubre de 1998 obtienen la marca de empresa constructora (capital $5.860.000). En mayo de 1990, junto con cambiar su razón social al transformarla en sociedad anónima cerrada, declaran un capital de $ 329.744.317. En junio de 2004, sus nexos societarios lo ligan a “Inmobiliaria y Constructora Vitacura 2.650 S.A.”, la nueva sociedad que crean Francisco Ruiz-Tagle Garcés, representando a Empresa Constructora Sigro S.A. (Avenida Isidora Goyenechea Nº 3250, Las Condes), y Carlos Alberto Vignau Martínez, por Inmobiliaria Génova S.A. (Avenida Isidora Goyenechea Nº 3250, Las Condes). Sigro (RUT 89.037.500-6), está representada en este proyecto por Francisco Ruiz-Tagle Garcés (Rut: 10.046.280-K).
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Es una marca comercial de Administradora San Francisco S.A., una sociedad creada en 2004 por los abogados Manuel José Ossa Pérez de Arce, Matías Izcue Elgart y Juan Agustín Laso Bambach. En 2006 registraron las denominaciones Viva Constructora e Inmobiliaria, Viva Gestión y Viva Grupo Inmobiliario. Viva tienen edificios en Vitacura, Santiago, Ñuñoa, Macul y Maipú. En esta última comuna, San Francisco tiene aprobada una Declaración de Impacto Ambiental para un megaproyecto que contempla una inversión de US$ 63 millones para la construcción de tres torres de 28 pisos para departamentos y dos de 18 pisos para oficinas.
Arquitectos: RuizTagle-Vicuña Arquitectos. Sus socios son Felipe Ruiz Tagle Correa, Hugo Vicuña Vicuña y Richard Kutzner Pumpin.Calculistas: Spoerer y Asociados Ingeniería Limitada, representada por Eduardo Spoerer Grez.Características del inmueble: Edificio de una torre, 26 pisos y 202 departamentos de los cuales había aproximadamente un 70% habitado hasta el terremoto.Valor de los departamentos: Desde 2.000 a 4.000 UF.Antigüedad: 11 meses. Situación: Bomberos recomendó evacuar, lo que sus moradores hicieron el mismo sábado 27. La evaluación municipal está en proceso. El edificio presenta daños estructurales en su parte baja que, según el ingeniero calculista de la inmobiliaria (cuyos representantes se reunieron el miércoles 4 de marzo con los propietarios), son reparables (se cayó la tabiquería y en algunos casos se ven hoyos desde los pasillos hacia los departamentos). La inmobiliaria calcula que los trabajos demorarían unos 6 meses. El principio de acuerdo que se trabaja contempla: pago por parte de la Inmobiliaria del dividendo y gastos comunes de los próximos seis meses; pago de las multas por el no cumplimiento de los contratos de arriendo que normalmente duran 1 año; pago de la mudanza de los vecinos hacia sus nuevas viviendas provisorias; pago de un inspector técnico de la obra escogido por los propietarios para que fiscalice los arreglos. Está en estudio también el pago de un ingeniero calculista escogido por los propietarios. En un reunión de la empresa con los residentes, el viernes 5, se condicionó el acuerdo a que los propietarios renuncien a ejercer acciones judiciales. Si no se llega a un acuerdo, los residentes preparan otra defensa.
Arquitectos: RuizTagle-Vicuña Arquitectos. Sus socios son Felipe Ruiz Tagle Correa, Hugo Vicuña Vicuña y Richard Kutzner Pumpin.Calculistas: Spoerer y Asociados Ingeniería Limitada, representada por Eduardo Spoerer Grez.Características del inmueble: Edificio de una torre, 26 pisos y 202 departamentos de los cuales había aproximadamente un 70% habitado hasta el terremoto.Valor de los departamentos: Desde 2.000 a 4.000 UF.Antigüedad: 11 meses. Situación: Bomberos recomendó evacuar, lo que sus moradores hicieron el mismo sábado 27. La evaluación municipal está en proceso. El edificio presenta daños estructurales en su parte baja que, según el ingeniero calculista de la inmobiliaria (cuyos representantes se reunieron el miércoles 4 de marzo con los propietarios), son reparables (se cayó la tabiquería y en algunos casos se ven hoyos desde los pasillos hacia los departamentos). La inmobiliaria calcula que los trabajos demorarían unos 6 meses. El principio de acuerdo que se trabaja contempla: pago por parte de la Inmobiliaria del dividendo y gastos comunes de los próximos seis meses; pago de las multas por el no cumplimiento de los contratos de arriendo que normalmente duran 1 año; pago de la mudanza de los vecinos hacia sus nuevas viviendas provisorias; pago de un inspector técnico de la obra escogido por los propietarios para que fiscalice los arreglos. Está en estudio también el pago de un ingeniero calculista escogido por los propietarios. En un reunión de la empresa con los residentes, el viernes 5, se condicionó el acuerdo a que los propietarios renuncien a ejercer acciones judiciales. Si no se llega a un acuerdo, los residentes preparan otra defensa.
Condominio Sol OrienteDirección: Macul 2301, Macul.Constructora: Sigro.Inmobiliaria: Viva. Características del inmueble: Son dos torres, una tiene entrada por Exequiel Fernández (A) y otra por Macul (B), en total son 380 departamentos.Valor de los departamentos: Desde 1.100 hasta 3.000 UF. Queda un 10% aún en venta.Antigüedad: La torre A tres años y la B dos años. Situación: Bomberos recomendó evacuar el mismo sábado 27 de febrero. La Dirección de Obras Municipales decretó inhabitable el edificio por severas fallas estructurales. El edificio se hundió 5 centímetros, los muros estructurales colapsaron y el octavo piso se desmoronó. Los vecinos están organizados, una de sus dirigentes, Zulema San Martín, informó que hubo heridos con cortes y golpes por desprendimientos de ornamento y vidrios. La comunidad se ha hecho asesorar por un grupo de expertos del Dictuc, quienes les entregarán un informe sobre el estado del edificio para enfrentar a la inmobiliaria, que hasta este viernes 5 de marzo no se aparecía.
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Ingevec y Simonetti
Edificio calle Rafael PradoDirección: Rafael Prado 222/ Dublé Almeyda 2355, Ñuñoa Constructora Ingevec: Inició actividades el 24 de diciembre de 1983 con un capital de $6 millones aportados por Francisco Vial Bezanilla, Enrique Besa Jocelyn-Holt y José Antonio Bustamante Bezanilla. Luego se sumaron Enrique Dibarrart, Gonzalo Sierralta, Ricardo Balocchi, Aldo Balocchi y Rodrigo GonzálezEn mayo de 1993 los socios originales, en representación de Ingevec, crean “Empresa Constructora Icafal-Ingevec Limitada”, pudiendo usar nombre de fantasía ICAFAL INGEVEC LTDA., con un capital de $5 millones y en mayo de 1994 nace “Constructora Incobal Ingevec Limitada”, nombre de fantasía “Incobal Ingevec Ltda.”, esta vez con un capital de $80 millones. En agosto de 1995, los dueños de Ingevec se asocian a Luis Ignacio Falcone Benavente, Gonzalo Falcone Benavente y Sergio Francisco Icaza Pérez, dueños de “Ingeniería y Construcción Icafal Limitada” y forman una nueva sociedad: “Inmobiliaria Icafal-Ingevec Limitada” con $20 millones de capital. En abril se produce el salto empresarial: junto a “Asesorías e Inversiones Santo Domingo Limitada”, “Inversiones Los Cipreses Limitada” e “Inversiones y Asesorías Marara Limitada”, transforman Ingevec en sociedad anónima cerrada (”Ingeniería y Construcción Ingevec S.A.”) aumentando su capital a $600 millones. En 1998 se asocian con José Francisco Hurtado Ruiz-Tagle. Además de la alianza con ICAFAL, Ingevec tiene otras tres empresas relacionadas: Progesta Inmobiliaria, GIMAX (Inmobiliaria Max) y Puerto Capital Inmobiliaria.Ha tenido un fuerte crecimiento en los últimos años, triplicando sus ventas entre 2004 y 2008, hasta casi alcanzar UF 6.000.000.000. Además de edificios, construye servicios (colegios, juzgados, clínica, etc), comercio (malls y supermercados) , industria (planta de Correos, Escuela de Caballería de Iquique, por ejemplo) y oficinas.
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La familia Simonetti ha estado históricamente ligada al rubro de la construcción por distintas vías. Fueron parte de los fundadores de la Constructora Almagro, luego se independizaron y los integrantes de la familia dividieron sus negocios, para finalmente unir fuerzas en torno a Simonetti Inmobiliaria S.A. Fue constituida en 1999 y creció bajo la mano de Felipe y Alejandro Simonetti. En 2007 se unió Juan Cúneo, uno de los socios principales y vicepresidente del holding Fallabella, quien adquirió el 20% de la sociedad, aunque los Simonetti mantuvieron en sus manos el timón gracias a un pacto controlador -que incluía a Cristián Undurraga y Rodrigo Lyon- que tiene el 51% de la propiedad.En esa época se informó de un cambio de modelo en la compañía, en que dejarían de construir para dedicarse exclusivamente a la gestión inmobiliaria, y del lanzamiento del proyecto de Rafael Prado con Dublé Almeyda, el mismo que construyó Ingevec y resultó dañado.El proyecto más grande de Simonetti es Barrio Lo Gallo, en Vitacura, que aún está en ejecución y contempla la construcción de 10 edificios.El último registro consignado en el Diario Oficial -de febrero de 2009- registra que el capital de la compañía aumentó hasta $22.077.829.518.
Características del inmueble: Torre de 20 pisos, 76 departamentos, con gimnasio, piscina y sala de eventos.Valor de los departamentos: De 4.900 a 5.700 UF. Aún hay 7 departamentos sin vender (Se trata de uno de los proyectos inmobiliarios más caros de la comuna)Antigüedad: Un año y 3 meses.Situación: Según Iara Barrios, vocera del comité de administración, no hay decreto de inhabitabilidad ni de desalojo por parte de la Municipalidad, pero la mitad de los propietarios decidieron irse. Los residentes contrataron topógrafos que señalaron que la construcción no tenía daños estructurales, opinión que comparte la inmobiliaria y constructora. Los empresarios no se han dirigido a la comunidad, salvo por un comunicado que pegaron en el hall del edificio en el que recomendaban activar sus seguros para reparar los daños. Con el terremoto se produjo desprendimiento de cerámica, ventanales quebrados, tabiquería rota, la loza del techo se fisuró y el muro de la salida de emergencia se quebró. El gimnasio y la sala de eventos están seriamente dañados. Ya durante el invierno pasado el inmueble presentó fallas, pues el piso 20 se inundó.
Vital y Penta
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Comunidad Regina OrienteDirección: Regina Pacis 760, Ñuñoa Consructora Vital: La sociedad Inversiones y Asesorías Vital Limitada fue constituida por el ingeniero Manuel Camilo Vial Rodríguez y Adriana Prieto Pizarro el 24 de enero de 1989 con un capital de $ 20.000.000. El 3 de abril de 2003, Vial y Prieto la transformaron en la sociedad comercial de responsabilidad limitada “Constructora e Inversiones Vital Limitada” o “Constructora Vital Ltda.”. Además existe Vital Maquinarias y Vital Transportes.Son dueños también de Inmobiliaria Nobleza, que firmó una promesa de compraventa en la Ciudad Parque Bicentenario –en el ex aeródromo de Cerrillos– para construir más de 1.000 viviendas a través de su contructora. En el mismo lugar se adjudicaron una licitación por US$ 11,5 millones para desarrollar un parque. Han construido torres de hasta 25 pisos y también han numerosos contratos con el Serviu Metropolitano para obras viales.
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Es parte de la división de administración de activos de Empresas Penta, un holding formado por los empresarios Carlos Alberto Délano y Carlos Eugenio Lavín. Son los dueños del nuevo Hotel Miramar y entre sus edificios más conocidos destaca Parque Las Lilas, que causó polémica pues para levantarlo se demolió el tradicional cine del mismo nombre en Providencia.Arquitectos: Alemparte-Morelli Arquitectos, de José Gabriel Alemparte y Patricio Morelli.Calculistas: René Lagos y Asociados.Características del inmueble: Edificio de una torre con 21 pisos, 178 departamentos y piscina.Valor de los departamentos: Desde 1.280 a 3.900 UF. Aún en venta 61 departamentos.Antigüedad: Un año y cinco meses.Situación: Bomberos sugirió evacuar y el martes 2 de marzo la municipalidad recomendó lo mismo.
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