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lunes, 4 de octubre de 2010

¿Quién usurpó a quién?

Por Eugenio Alvial Díaz

A propósito de la prolongada contienda que sostuvieron los mapuches en huelga de hambre y personeros del Gobierno por la aplicación o no de algunas leyes, creemos oportuno traer a colación algunos tópicos relacionado con este complejo asunto, que por lo demás, tiene varias facetas y aristas.

Está a la vista que el primer gran problema, o de fondo, es la posesión de la tierra a la que aspiran los mapuches, objetivo que rechazan de plano los actuales propietarios o terratenientes; luego están otras aspiraciones como el respeto legal a su cultura; asistencia por parte del Estado para que puedan desarrollar actividades productivas; acceso a la educación estatal, dentro del marco de su cultura, más algunas otras peticiones que desconocemos.

Así es que, para hacer un análisis objetivo, el tema amerita uno que no pierda de vista los hechos históricos que se remontan al siglo XV.
Chincha fue una importante cultura del Intermedio Tardío.

Según consigna don Francisco Encina en su Historia de Chile: “uno o dos siglos antes de la invasión incaica (1460-1490) un pueblo guerrero (se refiere a los mapuches) se incrustó, como una cuña, en la cultura que acabamos de reseñar (se refiere a la civilización chincha-chilena), a la altura del Cautín, cortándola en dos porciones (se refiere a picunches por el norte y huilliches por el sur). El uso por parte de los mapuches de vocablos tales como nahuel (tigre) y huanque (avestruz), aparte de otras costumbres, hace suponer a Encina que los araucanos (denominación española) provenían de las hoy, pampas argentinas, sin posibilidades que hubieran llegado por el norte o sur del actual territorio chileno (recuérdese que hasta 1881 el territorio nacional abarcaba también desde el sur de la provincia de Cuyo, en diagonal hasta Bahía Blanca y hasta la Patagonia, área que pertenece hoy a Argentina).

La alfarería chincha
 En esta apretadísima síntesis, queremos resaltar el hecho que el pueblo mapuche no tiene origen ni pertenencia a la civilización chincha-chilena (actualmente ellos han manifestado claramente que no son chilenos), por lo tanto, la “cuña” de la que habla Encina tendríamos que calificarla como una usurpación de tierras, desde el río Bio-Bio hasta el río Cautín, pertenecientes a los naturales chincha-chilenos.

Es obvio que la preponderancia que alcanzó el pueblo mapuche durante la conquista española se debió a la belicosidad y actitud guerrera que demostraron frente al bien entrenado y disciplinado ejército español, a la sazón el más importante de Europa.

El poeta y escritor Alonso de Ercilla se vio abocado a crear un magnífico poema épico, La Araucana, que destacó sin reservas la capacidad guerrera de los mapuches, tal vez, como una forma de justificar las dificultades tuvieron los experimentados militares españoles ante estas hordas de salvajes e impresionar positivamente al rey Felipe II para mantener su apoyo en la conquista. Ensalzando al enemigo, las derrotas se hicieron más soportables y el picor en el orgullo hispano menos caústico.


Cerámica chincha

De esta forma, la mayoría del resto de indígenas del territorio chileno y colindantes con el océano Pacífico, por ser no beligerantes e industriosos, pasaron a un segundo plano y casi ignorados, hasta que la Historia salió al rescate.

Como estamos empeñados en ser siempre objetivos, debemos reconocer que desde la llamada pacificación de la Araucanía hasta hoy, han ocurrido hechos que están fuera de lo legal, respecto a la pertenencia de la tierra, tal como ha ocurrido también con los naturales en Norteamérica, por ejemplo: abusadores con la fuerza y abusados que se han dejado atropellar.
 

Mapuches en ruca
  Es indudable que el Estado chileno, a través de los años, no ha sabido encarar y encontrar una solución justa para las partes. Creemos que está fuera de toda discusión, en el año 2010 y como miembros de la OCDE, establecer una política clara que respete las etnias naturales que están bajo la bandera de Chile: sus territorios razonablemente demarcados, costumbres, cultura, religión y apoyo para su progreso.

No es lógico ni sano para el país, convivir con un contrincante dentro del territorio nacional.


domingo, 3 de octubre de 2010

¿Qué es Krohne Archiv?



Un periódico que ofrece a centenares de lectores de todo el mundo un periodismo puro y nuevo. Por el momento se edita sólo en español, aunque se comtemplan en el futuro ediciones en los idiomas inglés y alemán.

Es un proyecto de periodismo sin fines de lucro y concentrado en la política, la economia y en los problemas sociales de América Latina. Llevamos a cada rincón del mundo los progresos y retrocesos de esta región con información clara, documentaciones, análisis y el apreciado aporte de nuestros columnistas.

En 6 meses de vida ya logramos 21.000 visitas. Es que somos un periódico pluralista que dice lo que otros callan.

¡Así de simple!

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Redacción central - Krohne Archiv

En ninguna parte, pero en todas



El rchazo del DIE. ¿Por qué el Estado debe decidir
lo que un ciudadano hace en su vida privada y personal?

Por Yoani Sánchez
Desde La Habana
Son las dos de la tarde en el Departamento de Inmigración y Extranjería (DIE) de la calle 17 entre J y K. Decenas de personas aguardan por un permiso de salida del país, esa autorización de viaje que han dado en llamar “tarjeta blanca”, aunque mejor sería decirle “el salvoconducto”, “la carta de libertad” o “la orden de excarcelación”.

Las paredes están descascaradas y un anuncio de “cuidado, peligro de derrumbe” se muestra a un costado de la enorme casona de El Vedado. Varias mujeres –que ya han olvidado sonreír y ser amables– visten sus uniformes militares y le advierten al público que debe esperar disciplinadamente. De vez en cuando gritan un nombre y el convocado regresa unos minutos después con el rostro jubiloso o con un puchero contenido.

Finalmente, me llaman para anunciarme la octava negativa de viaje en apenas tres años. Especialistas en despojarnos de lo que podríamos vivir, experimentar y conocer fuera de nuestras fronteras, los funcionarios del DIE me comunican que no estoy “autorizada a viajar por el momento”.

Con ese breve no –dicho casi con deleite– he perdido la posibilidad de estar en el 60 aniversario del Instituto de Prensa International y en la presentación de Internet para el Nobel de la Paz en New York. Un cuño sobre mi expediente y me vi obligada a hablar vía telefónica en las actividades de Torino Capital europea de los jóvenes, y a comunicarme con la editorial Brûlé para que lance Cuba Libre en Montreal sin mi presencia.

El absurdo migratoria se ha interpuesto entre mis ojos y los repletos estantes de la Feria del Libro de Frankfurt, entre mis manos y esa compilación de textos que verán la luz en el Festival de Literatura de no ficción en Polonia. Ya no llegaré a la Feria de Periodismo de Ferrara ni a la presentación del documental en Jequié, Brasil; mucho menos podré participar en el Congreso de Mujeres Liderando el Milenio, con sede en Valencia, y tampoco en Cuneo, durante el evento Scrittori in Citta. Mi voz no se escuchará en LASA, a donde sí han enviado una representación oficial y la aparición de mi libro Gestión y Desarrollo de Contenidos con WordPress tendré que disfrutarla en la distancia.

Todo eso y más me han arrebatado. Sin embargo, me dejan –como si se tratara de un castigo– junto a la materia prima fundamental de la que salen mis escritos, en contacto con esa realidad de la que no me perdonaría estar ausente.




20 años de la reunificación alemana: Más allá de todas las estadísticas

Alemania celebra hoy con una gran fiesta en Berlín una fecha histórica: La reunificación que se logró hace veinte años tras la caida del Muro de Berlín en 1989 y la disolución posterior de la República Democrática Alemana. El redactor jefe de la Deutsche Welle, Marc Koch, analiza las dos decadas que cumple hoy la nueva Alemania.

En la celebración de este aniversario dominan las estadísticas: datos y cifras que dan cuenta de la situación en la que hoy, 20 años después de la reunificación, se encuentra Alemania. Y es lo correcto: muchas de esas estadísticas demuestran que en los últimos dos años también se han cometido errores, que las injusticias persisten, que el desempleo en el este del país duplica al del oeste, que la remuneración por el mismo trabajo sigue siendo más alta en la parte occidental de Alemania que en la oriental. Todo esto puede leerse en un sinfín de inteligentes estudios científicos, pero ¿qué dice realmente del país posterior a la reunificación? No mucho.

Históricamente único

El principal y todavía inconcluso proyecto de la historia de la posguerra alemana no se deja, sin embargo, medir en cifras. Claro está que los ciudadanos de la antigua república occidental notan el peso financiero que generan, y continuarán por largo tiempo generando, las transferencias millonarias a la Alemania oriental. Y aún mayor fue el desafío al que tuvo que hacer frente la gente en la RDA, cuando, colapsado el Estado social, política y económicamente, se vio obligada a empezar una nueva vida totalmente de cero.

Pero los éxitos siguen sin recibir el reconocimiento merecido en la opinión pública alemana. Por el contrario, se lamenta demasiado, y eso a pesar de que las quejas, 20 años más tarde, no son más que el reflejo de puros intereses políticos. Tanto en el oeste como en el este. Nadie podía esperar realmente que en sólo dos décadas dos sistemas sociales tan distintos como los de la RFA y la RDA pudieran llegar a ser uno por completo. Quien exige que pasados 20 años no se perciba ni una sola diferencia entre el este y el oeste, no ha comprendido la verdadera dimensión de un acontecimiento inaudito e históricamente único.

No es momento para experimentos

Todo esto no pone en absoluto en tela de juicio el hecho de que, entre el día en que cayó el Muro de Berlín y el 3 de octubre de 1990, se cometieron muchos errores y muchas situaciones se valoraron incorrectamente.

Hoy reina el consenso de que los arquitectos de la reunificación alemana carecían en aquel momento de tiempo para practicar experimentos, de tiempo para llevar a cabo una aproximación pausada de los dos Estados. En un instante en el que el orden mundial hasta la fecha conocido vivía transformaciones profundas, tenían que aprovechar la oportunidad única que les brindaba la historia, y así lo hicieron.

Por supuesto que fue apresurado prometer que la unidad acontecería en pocos años y a un precio moderado, tal y como aseguró el ex canciller Helmut Kohl en 1990. Esas palabras han sobrevivido hasta la actualidad y ofrecen munición para muchas discusiones, pero no pueden menguar los méritos de Kohl y de todos los que encauzaron la unidad alemana.

Alemania se ha beneficiado de la reunificación en todos los aspectos. De esto forma también parte- y no es poco- el que en los últimos 20 años el país se haya vuelto más abierto, colorido, vivaz y relajado. Ha aprendido a enfrentarse a las contradicciones, a las preguntas candentes y a los conflictos sociales, y ha dejado de esconderlos bajo la alfombra.

Y no trata de pescar respuestas en aguas turbias; abre los ojos, reflexiona, mira y pregunta. Alemania es un laboratorio, una sociedad en el centro de Europa sometida a constantes cambios, retos y nuevas experiencias. También ésta es una de las consecuencias de la reunificación. Y dice más de este país que todas las estadísticas.

Salud: La causalidad social de la enfermedad

Por Hugo Latorre Fuenzalida

La medicina industrial, que es la que ahora tenemos, tiende a responsabilizar al individuo de sus males de salud; es decir carga la responsabilidad sobre las enfermedades que lo aquejan a sus hábitos de vida, a su descuido y a sus neurosis.

¿Pero es tan así la realidad?

Los griegos tenían un sentido más holístico de la salud; desde la doctrina estoica ya se predicaba una vida sana, como secreto para una salud buena. Comer poco, sólo cosas naturales y control sobre sí mismo y sobre el entorno. Es decir, una especie de armonía interior y exterior, para poder mantener al organismo con funcionalidad óptima.

La escuela epicúrea predicaba el equilibrio entre vida corporal y mental, para llegar a la “ataraxia”, que era la plena conformidad y armonía de vida.

Los dionisiacos se permitían ciertos excesos celebrativos, pero como parte contributiva a una vida transida de alegrías y no puros deberes.

La escuela moderna de medicina europea, en su anamnesis (revisión hacia atrás) y en sus tratamientos siempre buscó causas integradoras de las enfermedades y también propuso tratamientos no puramente curativos, sino preventivos y correctivos de los trastornos.

Pero con el avance de los elementos tecnológicos de diagnóstico, propio de un estilo “estadounidense” de abordar la salud: rayos, activadores químicos, moleculares, electrónicos, isótopos radioactivos, etc. la medicina ha ido derivando cada vez más a la diagnosis desintegrada o particularizada del cuerpo humano, incluso de sus órganos.

El incremento de la investigación en medicina, hace imposible que un facultativo domine todos los campos del saber médico, lo que ha obligado a la especialización y a la subespecialización. Los traumatólogos, ahora, ya no son especialistas del campo traumatológico, ya son expertos sólo en rodilla, en manos, en columna, en máxilofacial, en imagenología, etc.

Siguiendo el paradigma (referente teorético) del industrialismo y su descomposición Taylorista de la producción y el trabajo, la medicina también ha estructurado una verdadera descomposición del trabajo médico; no sólo ha dividido el cuerpo en partes sino que la medicina, como un todo, está fragmentada en áreas totalmente separadas, donde ese pobre humano, que posee un organismo articulado y no descoyuntado en segmentos, se ve obligado a recurrir a esos encasillamientos o compartimentos en que hoy se fraccionan los servicios de atención a la salud.

Existe, en consecuencia, la industria farmacológica, que se divide en laboratorios de fabricación y las cadenas de distribución al consumidor, es decir las farmacias. Entre ellas se ha ido produciendo la misma estructura que en la industria propiamente económica, es decir verdaderas alianzas, trusts y colusiones productivas y comerciales que las hacen tremendamente oligopólicas y muy competitivas.

Estas alianzas se extienden también hasta las universidades e institutos de investigación, pues los laboratorios farmacéuticos establecen acuerdos con estos organismos dedicados a la formación de especialistas que desarrollan en las etapas de postgrado ciertas líneas de investigación, para compartir las patentes y financiar laboratorios y personal, con tal de quedarse, finalmente, con gruesa parte del provecho económico de los nuevos descubrimientos en el campo de su interés. De esa manera, captan especialistas, aseguran líneas de trabajo, pagan postgrados a alumnos prometedores y financian parte de los gastos de las universidades, en equipamiento.

También los laboratorios se esmeran en instalar campañas para promover sus productos. No escatiman gastos en visitadores médicos y lujosa documentación ad-hoc, con trabajos investigativos que avalan las bondades del medicamento, realizado por expertos vinculados a sus alianzas estratégicas, pero donde pocas veces se citan los cuestionamientos al mismo.

Este despliegue publicitario incluye comisiones a los vendedores de las farmacias y presión sobre los facultativos para que favorezcan la prescripción de dichos productos.

Por otra parte, la industria de equipos médicos conforma otra área de gran rentabilidad económica. No es un misterio que la industria de la medicina técnica ha ayudado a resolver un gran número de diagnósticos y tratamientos que antes no se podían abordar. La aparatología médica marcha hacia la nanotecnología, lo que permite una acción más eficaz y menos invasiva del cuerpo.

Todo esto está bien y parece loable como avance humano hacia una mejor calidad de vida para los enfermos. Pero el problema no está ahí. El problema está en saber por qué la población se enferma tanto, de tantas cosas y cuesta tanto tratarlas.

Un conjunto de médicos de Centroamérica, El Caribe y México se dedicaron a investigar este tema por allá por los años 80 del siglo XX. Tal vez lo que gatilló el interés fue su afiliación a tesis y categorías marxistas de análisis de la realidad social, la que deseaban trasladar de manera efectiva y eficiente al campo de la salud.

Luego de revisar la epidemiología histórica, con sus patologías, pestes y mortandades, pudieron instalar la hipótesis de trabajo que las enfermedades no derivan sólo de factores individuales y ambientales o ecología de la salud, sino que había determinantes organizativos, en lo social, que estaban actuando como factores causales efectivos de las enfermedades de alta incidencia, no sólo de las enfermedades históricas sino también de las enfermedades llamadas “modernas”.

De ahí deriva la tesis de que existe en las enfermedades actuales una alta incidencia de una real “causalidad social”.

Es un hecho que las sociedades pobres tienen diversas patologías, pero la mayoría de ellas son por carencias; así como las sociedades opulentas exhiben perfiles de patologías distintos y fundamentalmente causados por excesos.

Es indiscutible que el sedentarismo físico y el estrés, propios del hombre moderno, habitante urbano y gran objeto de consumo industrial, es víctima de enfermedades que se han vuelto epidemiologicamente significativos: enfermedades cardiovasculares, trastornos gastroenterológicos, cáncer, traumatología, enfermedades degenerativas, trastornos de la conducta, etc.

El problema está en que la lógica de la producción y el consumo industrial ocasiona en la salud una verdadera cadena sistémica con inputs (factor productor de enfermedad) y aparato de respuesta curativa (output). De esta manera la enfermedad se transforma en un negocio muy productivo, por lo masivo y por los elevados costos que lleva implícito su abordamiento. Así es que, por una parte la sociedad va generando los enfermos y por otro lado va creando los sistemas de curación, sin parar mientes en frenar la causalidad como estrategia racional para abordar el tema de la salud-enfermedad en las sociedades humanas.

Si la economía urbana del automóvil privado multiplica las víctimas por accidentes, la respuesta que da la lógica industrial no va dirigida a asegurar un transporte público más seguro, eficiente y económico sino en aumentar los centros dotados de especialistas en prótesis, traumatología, etc.

Tanto la industria farmacológica, la industria de aparatología médica y los sistemas de atención al paciente (servicios médicos), se han constituido en los más especulativos y rentables de todas las actividades económicas, con excepción tal vez de la industria de armamentos y otras actividades que operan fuera de la ley.

Unos investigadores estadounidenses realizaron un estudio por los años 80 en Venezuela para determinar cuáles eran los costos implícitos en la traumatología, derivada de la accidentabilidad, por el uso del automóvil. Pues el resultado fue sorprendente: era superior a todo el presupuesto de la seguridad social, cada año. En ese estudio se incorporaban las pérdidas físicas o materiales, más el lucro ocioso por convalecencia, muertes, daños a la propiedad y seguros comprometidos, amén de los costos médicos.

Como podemos apreciar, la organización supuestamente “racional” de la sociedad moderna, produce sus propias antinomias, donde pareciera que Lucifer se ha ocupado en meter su cola.

sábado, 2 de octubre de 2010

Brasil/Elecciones: Los medios privados de comunicación en guerra contra Lula y Dilma

Nota de la Redacción: Mañana se efectuará en Brasil la esperada elección presidencial,  cuyo ganador reemplazará al actual presidente Luiz Inácio Lula da Silva. Los tres principales candidatos son Dilma Rousseff (Partido de los Trabajadores - de Lula), José Serra (Partido de la Social Democracia Brasileña) y Marina Silva (Partido Ecologista). Según las últimas encuestas, la favorita es Dilma Rouseff con 48% de las preferencias (Vox Populi), contra 27 por ciento de Serra y 12 por ciento de Silva. El 1 de enero de este año, los porcentajes eran diferentes: 34% para Serra,  27 para Rouseff y 9 para Silva. En todo caso, todo indica que recien en una segunda vuelta se conocerá el nombre del nuevo presidente de este importante estado latinoamericano. Asimismo, junto con la presidencial habrá elecciones generales para elegir a los gobernadores de los 26 estados brasileños, 54 de los 81 miembros del Senado y los 513 miembros de la Cámara de Diputados.

 
Por Leonardo Boff

Estoy profundamente a favor de la libertad de expresión por la cual fui castigado con «silencio obsequioso» por las autoridades del Vaticano. A riesgo de ser preso y torturado ayudé a la editorial Voces a publicar el libro Brasil Nunca Mas, donde se denunciaban las torturas usando exclusivamente fuentes militares, lo que aceleró la caída del régimen autoritario


Esta historia de vida me avala para hacer las críticas que hago ahora al enfrentamiento actual entre el Presidente Lula y los medios de comunicación que se quejan de que se menoscabe su libertad. Lo que está ocurriendo ya no es un enfrentamiento de ideas y de interpretaciones en el uso legítimo de la libertad de prensa. Se está produciendo un abuso de la libertad de prensa porque, previendo una derrota electoral, esos medios han decidido hacer una guerra tenaz contra el Presidente Lula y la candidata Dilma Rousseff. En esa guerra vale todo lo factible: la ocultación de hechos, la distorsión y la mentira directa.

Es necesario dar el nombre de estos poderosos medios. Son familias que, cuando ven contrariados sus intereses comerciales e ideológicos, se comportan como «familia» mafiosa. Son dueños privados que pretenden hablar para todo Brasil y mantener bajo tutela a la llamada opinión pública. Son los dueños de O Estado de São Paulo, A Folha de São Paulo, O Globo y la revista Veja, en los cuales se instaló la razón cínica y lo que hay de más falso y mafioso en la prensa brasileña. Están al servicio de un bloque histórico asentado sobre el capital que siempre explotó al pueblo y que no acepta a un Presidente proveniente de ese pueblo. Más que informar y suministrar material para la discusión pública, pues esa es la misión de la prensa, estos medios empresariales se comportan como un feroz partido de oposición.

En su furia, cual desesperados e inapelablemente derrotados, sus dueños, editorialistas y analistas no tienen el mínimo respeto debido a la más alta autoridad del país, el Presidente Lula. En él ven solamente un peón que debe ser tratado con el látigo de la palabra que humilla.

Hay un hecho que ellos no consiguen digerir en su estómago elitista: aceptar que un obrero, nordestino, sobreviviente de la gran tribulación de los hijos de la pobreza, haya llegado a ser Presidente. Este lugar, la Presidencia, así piensan, les corresponde a ellos, los ilustrados, los entroncados con el gran mundo, aunque no consigan librarse del complejo de no tener personalidad propia, pues se sienten meramente menores y asociados al gran juego mundial. Para ellos, el sitio del peón es produciendo en la fábrica.

Como lo mostró el gran historiador José Honório Rodrigues (Conciliação e Reforma), «la mayoría dominante, conservadora o liberal, ha sido siempre alienada, antiprogresista, antinacional y no contemporánea. El líder nunca se reconcilió con el pueblo. Nunca vio en él una criatura de Dios, nunca lo reconoció, le gustaría que fuese lo que no es. Nunca vio sus virtudes ni admiró sus servicios al país, lo llamó de todo, inútil, bueno para nada, arrasó su vida y después que lo vio crecer le negó poco a poco su aprobación, conspirando para colocarlo de nuevo en la periferia, sitio que sigue pensando le pertenece».

Este es pues el sentido de la guerra que montan contra Lula. Es una guerra contra los pobres que se están liberando. Ellos no temen al pobre sumiso; tienen pavor del pobre que piensa, que habla, que progresa y que hace una trayectoria ascendente como Lula. Como se deduce, se trata de una cuestión de clase. Los de abajo deben quedarse abajo. Pero ocurre que alguien de abajo llegó arriba, convirtiéndose en el presidente de todos los brasileños. Esto para ellos es sencillamente intolerable.

Los dueños y sus aliados ideológicos han perdido el pulso de la historia. No se han dado cuenta de que Brasil ha cambiado. Han surgido redes de movimientos organizados, de donde viene Lula y tantos otros líderes. Ya no hay lugar para coroneles y para los que se sentían caudillos del pueblo. Cuando Lula afirmo que «la opinión pública somos nosotros», frase tan distorsionada por esos medios rabiosos, quiso enfatizar que el pueblo organizado y consciente arrebató a los medios comerciales la pretensión de ser los formadores y portadores exclusivos de la opinión publica. Tienen que renunciar a la dictadura de la palabra escrita, hablada y televisada y disputar con otras fuentes de información y de opinión.

El pueblo cansado de ser gobernado por las clases dominantes decidió votar por sí mismo. Votó por Lula como representante suyo. Una vez en el gobierno realizó una revolución conceptual, inaceptable para ellas. El Estado no se hizo enemigo del pueblo, sino inductor de cambios profundos que han beneficiado a más de 300 millones de personas. De miserables pasaron a ser trabajadores pobres, de trabajadores pobres pasaron a ser clase media baja y de clase media baja pasaron a clase media. Empezaron a comer, a tener luz en casa, a poder mandar los hijos a la escuela, a ganar mejor salario y, en fin, a mejorar la vida.

Otro concepto innovador ha sido el desarrollo con inclusión social y distribución de la renta. Antes había solamente desarrollo/crecimiento que beneficiaba a los ya beneficiados a costa de las masas destituidas y con salarios de hambre Ahora se ha dado una visible movilización de clases, generando satisfacción de las grandes mayorías y la esperanza de que todo todavía puede ser mejor. Concedemos que en el gobierno actual hay un déficit de conciencia y de prácticas ecológicas, pero hay que reconocer que Lula fue fiel a su promesa de hacer amplias políticas públicas dirigidas a los más marginados.

Lo que la gran mayoría desea es mantener la continuidad de este proceso de mejora y de cambio. Esta continuidad es peligrosa para los medios empresariales que presencian, asustados, el fortalecimiento de la soberanía popular que se vuelve crítica, ya no manipulable, y con deseo de ser actor de esa nueva historia política democrática de Brasil. Va a ser una democracia cada vez más participativa y no solamente de delegación. Ésta abría un amplio espacio a la corrupción de las elites, daba preponderancia a los intereses de las clases opulentas y a su brazo ideológico que son las empresas de la comunicación.

La democracia participativa escucha a los movimientos sociales y hace del Movimiento de los Sin Tierra (MST) –odiado especialmente por Veja, que no quiere ni verlo– un protagonista de los cambios sociales, no solamente con referencia a la tierra, sino también al modelo económico y a las formas cooperativas de producción. 

Lo que está en juego en este enfrentamiento entre los medios comerciales y Lula/Dilma es esta pregunta: ¿Qué Brasil queremos? ¿Aquel injusto, neocolonial, neoglobalizado y, en el fondo, retrogrado y envejecido, o el Brasil nuevo con sujetos históricos nuevos, antes siempre mantenidos al margen y ahora despuntando con energías nuevas para construir un Brasil que hasta ahora nunca habíamos visto?

A este Brasil se le combate en la persona del Presidente Lula y de la candidata Dilma. Pero ellos representan lo que debe ser y lo que debe ser tiene fuerza. Triunfarán a pesar de los malos deseos de este sector endurecido de los medios comerciales de comunicación. La victoria de Dilma dará solidez a este camino nuevo, ansiado y construido con sudor y sangre por tantas generaciones de brasileros.

"Se obedece pero no se cumple"

Por Eugenio Alvial Díaz


Han pasado los siglos, pero seguimos con aquella colonial costumbre que seguían los Gobernadores y altas autoridades, representantes del Rey, cuando recibían las cédulas reales desde Madrid, con órdenes e instrucciones para mejor gobernar el Reino de Chile, deseos reales que no eran compatibles con la realidad de una colonia que estaba a miles de kilómetros, y que era casi totalmente desconocida para los consejeros del Rey, agregando además, que había intereses locales particulares que habrían sido perjudicados si se hubiera acogido los mandatos desde España.

Pero, estaba de por medio la lealtad al Rey, amén de algún funcionario del medio del escalafón, que deseoso de ascender hiciera llegar algún cuento a palacio y provocar una reprimenda o castigo que terminara con la carrera del Gobernador. Luego, para evitar contratiempos desagradables, dicho Gobernador tomaba la real cédula y poniéndosela sobre su cabeza, decía: “Se obedece, pero no se cumple” y asunto arreglado.

Hoy en día, en los albores del siglo XXI, dentro de Chile, y aún más, dentro de la ciudad, ocurre algo similar sin que medien reyes, cortesanos y palacios, por supuesto. Es así que el diario electrónico El Mostrador dio cuenta de un informe de la U. de Chile que acusa a inmobiliarias de no cumplir con compensaciones ambientales y agrega que sindica como principal responsable a la Conama.

El asunto, en líneas generales, radica en que cualquier obra que contamine el medio ambiente, debe ser atenuado con un sistema de compensación de emisiones (150% más de lo emitido) y que una de las maneras de hacerlo es través de la forestación.

Ha habido un par de empresas que aceptaron cumplir este requisito y así pudieron realizar sus proyectos. Sin embargo, cuando la U. de Chile fiscalizó el cumplimiento de las obras de compensación de emisiones, éstas se habían realizado en un porcentaje menor al estipulado o se habían realizado, pero sin los cuidados ulteriores lo que dañó la plantación, o se habían elaborados informes falsos de cumplimiento.

Como explicación se dijo que las compañías habían entregado las especies arbóreas a las respectivas municipalidades donde se realizarían las plantaciones. Pero, no consideraron que no es labor de los municipios completar faenas, que por contrato deben realizar las empresas involucradas; por lo demás, la mayoría de las municipalidades no cuenta con presupuestos ni personal para efectuar dichas faenas.

Ante situaciones como la relatada, cabe hacer notar que la Conama o la organización que corresponda, salvo acuerdo extraoficial por medio, debiera constatar y supervigilar la realización total de los compromisos adquiridos por los oferentes. Evidentemente, dichas acciones requieren del personal pertinente, con los medios adecuados para llevarlas a cabo; deducimos, por lo tanto, que debe haber un presupuesto que sustente la fiscalización eficiente.

Pero, ¿qué pasa si no hay la organización y el presupuesto?, muy simple, no hace nada, como al parecer ocurre en la actualidad. Entonces, ¿cuál es el fin del trámite burocrático, que cuesta tiempo y dinero, para exigir a las empresas que hagan obras de compensación si no se va a fiscalizar su realización?

A simple vista, nos parece que sería muy conveniente que las autoridades fiscales sobre todo, tuvieran presente que a partir de la Colonia quedó incorporado en el gen de los chilenos aquello de “se obedece pero no se cumple”, porque ahora las ordenanzas no tienen que viajar desde Madrid al Puerto de Palos, embarcarlas en naves a vela que tienen que atravesar un océano, luego un tramo de otro y por último de Valparaíso a Santiago, periplo de meses, que podría justificar la desobediencia por extemporaneidad o simple olvido.

Un Sistema Político Bloqueado

Por Carlos Huneeus


"Bachelet privilegió su imagen sin involucrarse en la solución de problemas conflictivos. Piñera parece seguir esa tendencia"

La demora en la tramitación del proyecto de ley de impuesto a la minería (royalty) remite a las limitaciones institucionales de la democracia. El gobierno responsabiliza a la oposición por no haberlo aprobado, una crítica absurda, porque es minoría en ambas ramas del Congreso, una situación de poder peor que la que enfrentó la Concertación, que controló la Cámara de Diputados hasta 2008. Hoy el gobierno de Piñera debe entenderse en ella con el PRI para tener mayoría. En el Senado hay un empate que hace aun más compleja la tarea del Ejecutivo, debiendo entenderse con la oposición y asegurar la cohesión de sus bancadas.

El gobierno debe negociar con la oposición, porque lo impone el tipo de democracia establecida, con una distribución de la autoridad en varias instituciones, más allá de la separación de poderes del Estado, que incluye un sistema múltiple de partidos, gobierno de coalición, bicameralismo asimétrico, un Senado cada vez más fuerte, un Banco Central autónomo, un poderoso Tribunal Constitucional, una Constitución extremadamente rígida, etc. Es una democracia de consenso en la definición de Arend Lijphart.

Este sistema político conduce a un bloqueo institucional por la existencia de poderes de veto en diversas instancias y produce un empate en el Congreso por el sistema binominal. Para sacar adelante los proyectos de leyes e impulsar políticas que afectan intereses poderosos, desde grandes empresas hasta sindicatos, este orden institucional exige intensas negociaciones entre diversos actores.

El ministro Lavín ha tenido éxito en neutralizar al Colegio de Profesores y evita llevar adelante la reforma institucional, desviando la atención pública hacia los "colegios de excelencia", una medida publicitaria. El
ministro Hinzpeter dilataba la solución del problema mapuche, negándose a ver que la democracia exigía entenderse con la minoría y con los poderes de veto, incluso huelguistas. De ahí que esta democracia se llame de negociación. La derecha empleó el poder de veto contra los gobiernos de la Concertación con
la ayuda de los senadores designados, recurrió al Tribunal Constitucional y a los grupos de interés.

El Presidente podría ser un actor que rompiera el bloqueo institucional, jugando un rol dinamizador del proceso político. Sin embargo, está limitado por la complejidad institucional antes indicada y debe compartir su autoridad con otras instituciones. El Presidente no se manda solo, aunque tome muchas decisiones que reafirman una presidencia personal, sin evitar el bloqueo institucional.

Ha habido un cambio en el rol de la Presidencia que la ha debilitado. Michelle Bachelet optó por un liderazgo que privilegió su imagen personal, sin involucrarse en la solución de problemas conflictivos. Piñera parece reafirmar este cambio de la Presidencia.

En síntesis, los problemas de la agenda legislativa son más complejos que la decisión de uno o dos senadores. Hay serias dificultades institucionales que debilitan la capacidad del sistema político para actuar con eficacia ante problemas complejos y ponen en jaque al poderoso Presidente de la República, que aparece como observador en este escenario político.

viernes, 1 de octubre de 2010

Comuneros mapuches depusieron huelga de hambre tras 81 días

Los representantes de los comuneros mapuches en huelga de hambre, a excepción de los de Angol, anunciaron esta noche el fin de la medida de presión que se prolongó durante 81 días, según confirmaron el arzobispo de Concepción Ricardo Ezzati y la vocera Natividad Llanquileo, informó Radio Cooperativa.

El "facilitador" del diálogo leyó un comunicado donde dió los lineamientos entregados por el Gobierno para lograr deponer el ayuno, como fue el retiro de las querellas por ley Antiterrorista, en un plazo de cinco días, juzgar a los afectados a través de los tribunales civiles y perfeccionar las modificaciones a la Justicia Militar.

"Hace algunas horas comunicamos esta resolución a los representantes de los comuneros en huelga de hambre, quienes nos han señalado la decision de sus representados de deponer la huelga de hambre de forma inmediata", expresó el arzobispo.

En el detalle que entregó de la propuesta del Gobierno, Ezzati leyó que "en consecuencia con estas reformas legales en curso, el Gobierno considera que lo que en derecho corresponde es no perseverar con las querellas terroristas presentadas bajo la Presidencia de Michelle Bachelet. El Gobierno no tiene convicción de que los hechos imputados a los comuneros mapuche pueden ser calificados de conductas terroristas"

"El Gobierno procederá a desistirse de todas las querellas por Ley Antiterrorista y replantear dichas normas bajo el derecho penal común, para ese efecto se realizará una presentación en el tribunal correspondiente en el curso de los próximos cinco días hábiles, tomando en consideración que la decisión ha sido tomada por el poder Ejecutivo por razones de Estado", añadió. Además, compromete reformas al código militar, para que los civiles sean juzgados por la justicia ordinaria.

Por su parte, para mañana sábado se espera la respuesta de los comuneros en huelga de hambre apostados en Angol, luego que sus representantes emprendieran viaje para interiorizarlos de la oferta entregada por La Moneda.

Un ayuno que se prolongó por 81 días

Diecisiete de los comuneros comenzaron la protesta el 12 de julio pasado para pedir el fin de la aplicación de la Ley Antiterrorista en el conflicto indígena, el término del doble enjuiciamiento en la justicia civil y militar, y el uso de testigos sin rostro en las causas. Posterior a la fecha de inicio hasta ahora fueron agregándose al ayuno el resto de los coumuneros hasta llegar a 36.

La noticia ocurre luego de dos reuniones: una en Concepción, entre el "facilitador" del diálogo monseñor Ricardo Ezzati, el abogado de los comuneros Adolfo Montiel, la vocera Natividad Llanquileo, la pareja de Héctor Llaitul, Pamela Pezoa, y el subsecretario de la Secretetaría General de la Presidencia, Claudio Alvarado.

En Temuco, en tanto, se reunieron los ministros del Interior, Rodrigo Hinzpeter, de la Presidencia, Cristián Larroulet, y los representantes de los mapuche recluidos en cárceles de la Región de la Araucanía.

Perú: Vladimiro Montesinos condenado a 25 años de prisión por graves violaciones a los derechos humanos

Vladimiro Montesinos, el siniestro
 jefe de Seguridad de Fujimori
La Justicia peruana condenó hoy a una pena de 25 años de cárcel al ex asesor presidencial del presidente Alberto Fujimori (hoy en prisión), Vladimiro Montesinos, y castigó también a duras penas a 21 ex militares por violaciones graves a los derechos humanos.

El grupo, identificado como Colina,  fue hallado culpable en cuatro distintos casos que en total dejaron un saldo de 25 muertos:  Caso Universidad La Cantuta: 9 estudiantes y un profesor muertos;  solar de Barrios Altos: asesinato masivo de 15 personas; valle de Santa: 9 campesinos (ocurrió en la madrugada del 2 de mayo de 1992 cuando los campesinos fueron sacados violentamente de sus viviendas por sujetos que portaban armas de uso militar. Hasta ahora se desconoce dónde están sus cuerpos); y la desaparición del periodista Pedro Yauri.

La Primera Sala Penal Especial, que preside Inés Villa Bonilla y está integrada además por las magistradas  Hilda Piedra e Inés Tello, determinó que los sentenciados, miembros de un escuadrón de la muerte liderado por el mayor Santiago Martin Rivas, bajo la dirección de Montesinos , eran culpables de los delitos de homicidio calificado, tentativa de homicidio y asociación ilícita.
Ex jefe del Comando Conjunto
 de las FFAA, Nicolás Hermoza Ríos

Las mayores penas de 25 años de prisión las recibieron Montesinos y Martín Rivas, igual que el ex jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas Nicolás Hermoza Ríos. También figuran en la lista de condenados los ex comandantes generales del Ejército peruano, Juan Rivero Lazo y Julio Salazar Monroe.


Santiago Martín Rivas
Martín Rivas fue sindicado a finales de 1992 como el líder del grupo Colina.  En 1994 fue condenado por la Justicia Militar a 20 años de prisión, pero en 1995 se vio beneficiado por una Ley de Amnistía. Antes de ser capturado, admitió los crímenes del “escuadrón de la muerte” e incriminó en dichos delitos a Alberto Fujimori.


La doctora Gloria Cano, abogada de la Asociación Pro Derechos Humanos (Aprodeh), manifestó que a casi seis años de iniciado el juicio contra el grupo Colina, tras muchas dilaciones y complicaciones,  la Sala Penal Especial hace justicia.

Piden nulidad de condenas

Las sentencias fueron leidas en una audiencia realizada en la Base Naval del Callao. Carlos Pichilingüe, integrante del grupo Colina, recibió igualmente una pena de 25 años, mientras que otros miembros del grupo criminal sentencias más bajas de entre 15 y 20 años.

Entre los 30 procesados también figuran el ex suboficial Jesús Sosa Saavedra, más conocido por el apodo de “kerosene”, por su supuesta predisposición a utilizar este combustible para quemar los cuerpos de sus víctimas.

El ex jefe del Grupo Colina, Santiago Martin Rivas, y el ex comandante general del Ejército, Nicolás Hermoza Ríos, pidieron de inmediato la nulidad de sus condenas.

"Lo menos que puedo hacer en uso de mis derechos, en la legalidad de este país, interpongo recurso de nulidad a una sentencia tan prevaricadora", dijo Martin Rivas a la Sala, comentario por el que recibió un severo llamado de atención.

En cambio, Hermoza Ríos fue más sereno al decir "interpongo recurso de nulidad y solicito una copia de la sentencia".

Montesinos, ex jefe del Servicio de Inteligencia (SIN), se reservó el derecho a apelar y aceptó la pena que se le impuso.

Las víctimas no eran terroristas

Durante la lectura de las sentencias la Sala tambien dejó constancia de que no se comprobó que las víctimas, en los cuatro casos, hubiesen sido terroristas.

Pedro Santillán Galdós es el único condenado del grupo Colina que podría salir libre muy pronto, debido a que fue sentenciado sólo a tres años de pena suspendida.

El diario Correo de Lima  recordó que el Grupo Colina operó bajo el manto protector del ex Presidente Alberto Fujimori y de los altos mandos militares.

EE UU cometió "crimenes de lesa humanidad" en Guatemala hace 62 años - 1.500 víctimas

Estados Unidos se disculpó hoy ante Guatemala por haber realizado experimentos en los años cuarenta del siglo pasado a través de los cuales científicos estadounidenses infectaron deliberadamente con enfermedades venéreas a 1.500 personas en ese país centroamericano.


El presidente Alvaro Colom calificó hoy de “espeluznantes” y “crímenes de lesa humanidad” los experimentos hechos por Estados Unidos entre 1946 y 1948, que infectaron intencionalmente a personas de este país con sífilis y gonorrea, y por los cuales Washington pidió perdón.

El gobernante aseguró que se realizará una “profunda investigación” de los hechos y adelantó que se analiza presentar una denuncia para exigir un resarcimiento al país. Reconoció igualmente la “hidalguía” de la Casa Blanca de pedir perdón.

Según Colom, las víctimas de esas “prácticas anti-éticas” y “deleznables” fueron en su mayoría soldados, presos, prostitutas y enfermos mentales.

El mandatario ordenó a sus ministros de Salud, Defensa y Gobernación, “ubicar” y “resguardar” los archivos de los años en que ocurrieron los hechos, los cuales servirán de base para “realizar una investigación” junto con el gobierno estadounidense.

Además dijo estar consciente de que esos experimentos “no forman parte de una política del actual gobierno” de los Estados Unidos, y que junto a funcionarios de alto nivel de la Casa Blanca “convenimos hacer una investigación conjunta”.

La noticia dio hoy vuelta al mundo y la BBC, en una entrevista, Colom confirmó la conversación telefónica con la Casa Blanca, en la cual el presidente estadounidense, Barack Obama, se disculpó personalmente ante el pueblo guatemalteco.

Los dos jefes de estado acordaron formar una comisión bilateral para estudiar dichos acontecimientos, integrada por científicos de ambos países. La comisión determinaría una posible compensación a las víctimas sobrevivientes de los experimentos o a sus familiares, agregó Colom.

Antes, la secretaria de Estado Hillary Clinton había calificado en un comunicado a este experimento como "poco ético y reprobable".

Hace 62 y 64 años, entre 1946 y 1948, el gobierno de Estados Unidos infectó a 1.500 personas en Guatemala con gonorrea y sífilis como parte de estudios médicos que tenían por objetivo probar si la penicilina servía como vacuna contra las enfermedades venereas.

La sífilis puede causar, entre otras cosas, problemas al corazón, enfermedades mentales, e incluso la muerte. Aunque los pacientes fueron tratados, no se sabe cuántos se recuperaron. La corresponsal de la BBC en Washington, Kim Ghattas, dijo que no hay claridad acerca de si el tratamiento que las víctimas recibieron después de los experimentos fue el adecuado.

Las pruebas del programa fueron descubiertas por la profesora Susan Reverby, del Wellesley College, quien asegura que el gobierno de Guatemala dio permiso para los ensayos.

Ghattas agregó que no hay todavía ofertas de indemnización, pero que una investigación se pondrá en marcha para conocer los detalles del estudio.

La declaración conjunta de Hillary Clinton y de la secretaria estadounidense de Salud, Kathleen Sebelius, expresó: "Lamentamos profundamente que haya sucedido, y pedimos disculpas a todas las personas que se vieron afectadas por esas prácticas odiosas de la investigación”.

Desilusión de Piñera por la decisión tomada por la Presidenta argentina en el caso Apablaza

El presidente de Chile, Sebastián Piñera, volvió a apuntar contra el gobierno de Cristina de Kirchner por la decisión de la Comisión Nacional de Refugiados (Conare) de conceder asilo político al ex guerrillero Galvarino Apablaza Guerra, acusado de homicidio y secuestro en 1991. Señaló que la determinación "no ayuda nada a las relaciones" entre los países, informó hoy Ambito Financiero en Buenos Aires.


"Por supuesto que no comparto la decisión del gobierno argentino. Galvarino Apablaza cometió un crimen en Chile, está siendo procesado en nuestro país por la justicia chilena, y desgraciadamente ese proceso se ve interrumpido por una decisión de la Conare argentina", señaló el mandatario.

Piñera sostuvo que se analizará "profundamente la resolución de la Conare para poder determinar los nuevos cursos de acción", y enfatizó que "la decisión no ayuda nada a las relaciones entre Chile y Argentina".

Si Apablaza "está procesado por la justicia chilena por un crimen cometido en nuestro país, lo normal es que la propia justicia chilena hubiera podido terminar de conocer esta causa y aplicar nuestra legislación y las sanciones que corresponden", afirmó el mandatario en el Palacio presidencial.

Apablaza era miembro del disuelto Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR, izquierda) y está acusado del asesinato del senador derechista Jaime Guzmán y de un secuestro, ambos ocurridos en Chile en 1991.

La Corte Suprema argentina había autorizado la extradición a Chile de Apablaza, pero la decisión final recaía en el gobierno de Cristina de Kirchner.

La Presidenta apesadumbrada: "Hay sutiles formas de desestabilización"


La presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, declaró hoy que sería "imposible" que ocurriera en Argentina una revuelta similar o parecida a la registrada ayer en Ecuador. Sin embargo, advirtió que había otras formas de debilitar al Gobierno, como "mentir y tergiversar" aludiendo en forma indirecta lo que le estaría ocurriendo a ella en su propio país.

En su primera aparición pública tras la revuelta en Ecuador y del asilo político concedido por su gobierno ayer al ex guerrillero Sergio Apablaza, supuesto autor intelectual del asesinato de un senador chileno en 1991, la Presidenta se ocupó de las consecuencias que puede tener la "desestabilización" del Gobierno.

Al mismo tiempo de apoyar al  presidente ecuatoriano Rafael Correa, quien ayer logró frustrar un supuesto golpe de Estado, dijo que "hay sutiles formas de desestabilización. Hay sutiles formas de golpear a los gobiernos constitucionales. Algo que es impensable en la Argentina, no por suerte, sino por la historia de tragedia que sufrió nuestro país. Pero hay otras formas sutiles como mentir, tergiversar y tratar de que nos enfrentemos entre los argentinos", publicó el diario bonaerense La Nación.

Hizo estas declaraciones tras inaugurar la Universidad Nacional de José C. Paz, ceremonia en la que participó acompañada de su esposo, el ex presidente Néstor Kirchner; el gobernador bonaerense, Daniel Scioli; y otros funcionarios.

En esta ocasión la mandataria respaldo sus decisiones en política exterior recordando el golpe de Estado contra el presidente hondureño Manuel Zelaya, en junio del año pasado.  "Me acuerdo que muchos me criticaron cuando no reconocimos a Honduras. Que importa Honduras, que parecía una cosa lejana y exótica. Ahora los tiros sonaron cerca en el vecindario. Entonces no dudé un instante en convocar a los presidentes de la región para apoyar la democracia en Ecuador".

"No me castigan por mis errores, me castigan por mis aciertos", dijo. "No es importante la crítica, lo que duele es la mentira, el agravio y la descalificación. Por momentos, en algunos el sentimiento es odio. Es muy malo odiar, porque endurece el corazón y cuando uno larga esa mala onda, en algún momento te vuelve", agregó seguidamente, según La Nación.


Ecuador: Bajo una tensa calma el país se recupera de la intentona golpista

Ecuador, especialmente Quito, amaneció hoy con una tensa calma. Mientras la rebelión policial-militar se daba por terminada, el ambiente urbano era de una fuerte militarización en las plazas y calles.

Tropas de las Fuerzas Armadas iniciaron hoy labores policiales en sustitución de agentes que hasta ayer se encontraban en una huelga rebelde, aunque un buen número de ellos comenzó a reintegrarse hoy a sus labores en los distintos cuarteles.

Paralelamente, el comandante de la Policía de Ecuador, Freddy Martínez, presentó hoy su renuncia tras la sublevación de ayer que dejó un saldo oficial de 2 muertos y 37 heridos.

Así lo confirmó el general Florencio Ruiz, jefe del Estado Mayor de la Policía, en una entrevista concedida a la cadena Teleamazonas. Él reemplazará temporalmente a Martínez en la Comandancia General.

Policías de todo el país protestaron el jueves en rechazo a una reforma legal que les corta beneficios económicos y retuvieron por varias horas al presidente Rafael Correa en un hospital, un hecho inédito en la nación que fue rechazado por la comunidad internacional.

En un impresionante operativo, militares ingresaron al hospital policial, situado en el norte de Quito, y se enfrentaron a tiros con manifestantes de la policía.

La calma observada por el diario El Comercio de Quito

Los pitos de los policías de Tránsito volvieron a sonar esta mañana en las calles de Quito, escribió el diario El Comercio de Quito. Esa es una de las evidencias de que los miembros de la Policía se reincorporaron a sus actividades tras un día de violentas protestas.

En las calles del Centro Histórico ya se vio desde las primeras horas de hoy a uniformados luciendo los chalecos fosforecentes, que identifican a los policías de Tránsito.

También se puede ver a agentes recorriendo las calles en motos y patrulleros.

En el Regimiento de Policía Quito 2, ubicado en las calles Mejía y Montúfar (Centro Histórico) también empezaron a salir los uniformados a pie o en patrulleros.

No obstante, las agencias bancarias y varios negocios del Centro de Quito atienden con sus puertas a medio abrir.

El rescate presidencial

Tres autos y decenas de militares llegaron por la calle García Moreno a las puertas del Palacio Presidencial. Eran las 21:33. Siete minutos antes, el Jefe de Estado había abandonado el Hospital de la Policía, luego del implacable operativo militar que dio fin a lo que él llamó “un secuestro de más de siete horas”.

Los cientos de simpatizantes del Gobierno, que permanecían en la Plaza Grande en señal de respaldo, no tuvieron tiempo de alcanzar a la caravana que trajo de vuelta a Rafael Correa, agregó El Comercio.

Con escudos plásticos, la escolta del Mandatario se abrió camino para acceder a la cochera. De fondo, por alto parlantes sonaba la canción Patria.

A su llegada al Palacio, el primero en abrazarlo fue el alcalde de Quito, Augusto Barrera y uno por uno, los ministros le mostraban su afectó, júbilo y solidaridad.

“Este ha sido el día más triste de mi vida y el día más triste de este Gobierno, por la infamia de los conspiradores de siempre”, comentó el Mandatario en tono enérgico. “Maltrataron, secuestraron al Presidente y para liberarlo han caído hermanos ecuatorianos”.

En su eufórico discurso no hubo espacio para la autocrítica. Correa no se refirió a la forma en la que su gobierno ha manejado políticamente el trámite del veto a la Ley de Servicio Público, que despertó la ira de la tropa de la Policía y de un sector de las FF.AA. Tampoco, si fue imprudente su inesperada visita al Regimiento Quito, en horas de la mañana y en medio de la convalecencia de su operación.

Correa aseguró a sus simpatizantes que “jamás aceptamos negociar nada”. “Bajo presión nada, bajo el diálogo todo”.

En su discurso culpó a gente cercana al ex presidente Lucio Gutiérrez de la crisis de ayer que fue “un intento de golpe de Estado”. Los simpatizantes en la Plaza Grada gritaron duras consignas en contra de Gutiérrez. Correa dijo que no habrá perdón para los pocos policías que planificaron la revuelta y que trabajará para la institución.

Editores rechazan clima de inestabilidad

La Asociación Ecuatoriana de Editores de Periódicos (AEDEP) rechaza el clima de inestabilidad institucional producido a partir del reclamo de la fuerza pública ante el veto presidencial que supuestamente elimina estímulos económicos para policías y militares.

En una democracia, cualquier reivindicación debe tramitarse dentro del respeto a las instancias legales y de un indispensable clima de tranquilidad, más todavía si el reclamo viene de un sector subordinado al poder civil.

A la vez, la AEDEP quiere dejar sentada su protesta por los ataques de los que fueron víctimas los periodistas de distintos medios durante la cobertura de los acontecimientos, y sobre todo por la decisión gubernamental de obligar a todos los medios audiovisuales a plegar a una cadena nacional “indefinida e ininterrumpida”, pues al amparo del estado de excepción se ha impedido a la ciudadanía tener otras versiones de los hechos que no sean los oficiales.

Página Editorial LA - Intentona golpista en Ecuador y Presupuesto fraudulento del gobierno argentino

Diario La Hora de Quito, Ecuador

Cada golpe de Estado ha significado un retroceso histórico para el Ecuador. Consciente de ello, Diario La Hora siempre se ha pronunciado contra estas graves violaciones de la Constitución y las leyes de la República. La defensa de los gobiernos legítimamente constituidos ha sido nuestra divisa y ahora no puede ser de otra manera. Una y otra vez a lo largo de los últimos doce años, hemos alzado nuestra voz en defensa de la democracia, única garantía de paz y libertad para nuestra Patria. Los hechos sin precedentes protagonizados por miembros de la Policía Nacional han puesto en peligro las instituciones y normas que garantizan la convivencia ciudadana en nuestro país.

Irresponsablemente, además, dejaron indefensa a la ciudadanía, que fue víctima de los desmanes de la delincuencia. Sus reclamos debieron buscar otras vías para ser atendidos por el Gobierno. Sin embargo, constituyen un llamado de atención. Mancillar y pisotear la dignidad, tratar de menoscabar y desconocer la autoridad del Presidente de la República, así como de los poderes del Estado legítimamente constituidos ponen en peligro el destino de todos. Nadie podrá sustraerse a las consecuencias de tan graves actos. Por tanto, unirnos todos en defensa de la democracia constituye más que un deber, una obligación ineludible.

Diario El Tiempo de Bogotá, Colombia
Intentona en Ecuador

Una compleja situación enfrenta Ecuador por cuenta de lo ocurrido ayer, cuando una insurrección de la Policía llevó al ataque con gases lacrimógenos -y posterior retención- al presidente Rafael Correa, quien finalmente fue liberado. La huelga de los uniformados generó caos en el país vecino con saqueos y robos en las ciudades principales, que condujeron a la declaración del estado de excepción y la militarización del territorio.

La causa de lo sucedido fue la aprobación, por la Asamblea Nacional, de la Ley de Servicio Público, que desmonta el generoso régimen de beneficios del que gozan hoy miles de funcionarios del Estado, incluyendo a hombres y mujeres que portan el uniforme. Desde hace rato, el inquilino del Palacio de Carondelet quiere acabar con los privilegios que ostentan ciertos empleados de la nómina oficial, pero, como lo demuestran los acontecimientos, llegar a una solución fácil es imposible.

Más allá de la razón que le asiste, el Jefe del Estado ecuatoriano ha hecho más difícil la crisis por cuenta de su estilo imperioso y, en ocasiones, impulsivo. Esa característica ha llevado a cierto distanciamiento entre el mandatario y algunos de los congresistas que integran la bancada de gobierno, que se han aliado con la oposición. De hecho, la protesta policial se da en momentos en que la Presidencia amenaza con disolver el Poder Legislativo por el lento trámite de las iniciativas y así gobernar por decreto y convocar a elecciones anticipadas. Como si eso fuera poco, hay quienes pescan en río revuelto, como el principal antagonista de Correa, el ex presidente Lucio Gutiérrez, con una gran ascendencia sobre las Fuerzas Armadas.

Pero, sin entrar a debatir los detalles o errores que se hayan podido cometer en el manejo de un tema tan difícil, es indudable que en Ecuador no hay un camino diferente al de preservar las instituciones democráticas. Así lo entendieron ayer y con rapidez el mundo entero y los países del hemisferio, como lo dejó en claro un pronunciamiento de la OEA, después de una convocatoria de emergencia de su Consejo Permanente. También fueron apropiados la respuesta de Unasur y el comunicado de la Casa de Nariño, llevado personalmente por Juan Manuel Santos a Buenos Aires, al expresar que Colombia solamente reconoce al gobierno de Rafael Correa.

Hechas esas precisiones, además de los votos para que la normalidad regrese pronto a ciudades y pueblos ecuatorianos, hay que lamentar la emergencia. El motivo principal es que la llegada del actual Jefe del Estado al poder vino acompañada de una buena dosis de estabilidad, fundamental en una nación en la que varios mandatarios no pudieron terminar sus respectivos periodos. De hecho, Ecuador ha sido testigo de tres golpes de Estado y seis mandatarios en los últimos diez años. Ahora se da un paso atrás, que no tiene nada de bueno, aparte de abrir heridas que pueden demorar varios meses en cerrarse, algo inconveniente en una sociedad que sufre los embates de la recesión global y una oleada de inseguridad considerable.

Tampoco es alentador el nuevo traspié que sufre la democracia en la región. Después del golpe en Honduras, que todavía divide a los países del continente, o de los intentos de varios presidentes de perpetuarse en el cargo y alterar el equilibrio de los poderes públicos, lo sucedido en Ecuador es un campanazo de alerta que necesita ser escuchado. Ojalá esta crisis sirva para que los pueblos de América Latina cierren filas en contra de las vías de fuerza y reiteren que, a pesar de sus imperfecciones, la democracia todavía encuentra un terreno fértil en el hemisferio.

Diario El Mercurio de Santiago de Chile
Las 15 horas críticas de Ecuador

Los acontecimientos desencadenados ayer en Quito, incluidos los enfrentamientos armados entre policías sublevados y miembros del Ejército, transmitidos en directo por los medios de comunicación, causaron, una vez más, alarma en Latinoamérica. Las protestas de grupos de policías y militares ecuatorianos, iniciadas a primera hora de la mañana en contra de una ley que privará de una serie de beneficios económicos a la administración pública -y no sólo a los uniformados-, derivaron en una abierta insurrección de sectores de la policía nacional que se tomaron un regimiento, bloquearon el aeropuerto y varias arterias de la ciudad y condujeron al Presidente Rafael Correa al Hospital General de la institución, donde quedó retenido por los rebeldes.

Frente a este cuadro, decretar el estado de excepción fue una señal de que tanto el gobierno como los demás poderes del Estado se mantenían en funciones, y se quería restablecer la normalidad institucional a la brevedad. Esto incluye el respaldo y obediencia a ella de las FF.AA., como lo explicitó el jefe del Estado Mayor Conjunto ecuatoriano. Ese acatamiento constitucional se vio corroborado con el operativo de rescate de Correa, protagonizado por el Ejército al anochecer, desde el hospital, cuando se cumplían 15 horas del inicio de la revuelta.

En medio de esta violenta experiencia que le ha tocado vivir, las primeras palabras de Correa estuvieron destinadas a agradecer los gestos de lealtad y a atacar a quienes presume responsables de lo sucedido, insinuando una utilización de la policía por parte de sectores políticos de oposición. Sus efusivas expresiones se entienden en el contexto emocional del momento. Sin embargo, para evitar el agravamiento de la actual situación, parece vital acotar claramente el alcance de la crisis y sus actores y, desde luego, que el gobierno del Presidente Correa se abstenga de transformar esto en un pretexto para aniquilar a la oposición política y social, cuyos dirigentes no han mostrado ninguna solidaridad con la revuelta. Tampoco debe serlo para que otros gobiernos -afines o no a la actual administración ecuatoriana- intenten interferir en el desenvolvimiento interno de ese país.

Al parecer, no se estaría ante un intento de arrebatar el poder a un gobierno electo, sino de crear por parte de grupos de policías y militares sin liderazgo conocido una anómala situación que fuerce a revocar la polémica ley que ellos perciben como atentatoria de derechos esenciales de sus instituciones.

El Presidente de Chile expresó inmediato apoyo a su par ecuatoriano, corroborando la estrechísima relación entre ambos países, marcada por el respeto mutuo, la defensa de valores comunes, la cooperación más allá de las fronteras y el respeto al Estado de Derecho. Las palabras con que Piñera expresa "el más absoluto y total respaldo" a su par ecuatoriano ratifican el compromiso de Chile con la defensa irrestricta de la democracia en la región.

La comunidad internacional brindó rápidamente su apoyo al gobierno de Correa. José Miguel Insulza, Secretario General de la OEA, fue tajante en repudiar "cualquier intento de alterar la institucionalidad democrática" de Ecuador, respaldando sus palabras con la voluntad de viajar a la brevedad a Quito. Asimismo, la reunión de emergencia de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) en Buenos Aires -a la que asistió el Presidente Piñera- muestra que algunas lecciones de la crisis del año pasado en Honduras se aprendieron y han comenzado a ser puestas en práctica.

En ésta existe hoy conciencia de la importancia de una reacción oportuna y enérgica frente a situaciones que amenacen la estabilidad de una democracia regional. Ese principio, por cierto, es aplicable tanto respecto del origen como del ejercicio de las democracias. Es crucial que esta conciencia y voluntad sean inequívocas y permanentes en las decisiones de todos los organismos regionales, sin distinción de países ni orientaciones políticas.

Este criterio incluye al gobierno de Correa, que pese a llevar adelante muy discutibles modificaciones a la estructura del Estado e intentar, entre otros, modificar las leyes que determinan el funcionamiento de los medios de comunicación, todavía está muy lejos del modelo autoritario y excluyente impuesto, por ejemplo, por el Presidente Chávez en Venezuela.

Diario La Nación de Buenos Aires, Argentina
Un presupuesto fraudulento

El proyecto de presupuesto 2011 enviado por el Ejecutivo al Congreso cumple con una tradición del gobierno del matrimonio Kirchner en la materia: el ocultamiento y la manipulación de las cifras para dejar luego librada una cantidad enorme de "recursos excedentes" que puedan ser distribuidos discrecionalmente con decretos de necesidad y urgencia.

De este modo, la ley de leyes pierde transparencia y dista de servir para fijar las previsiones oficiales, que deberían ser las más confiables, sobre el devenir de la actividad del mayor actor económico, el Estado nacional. Pero así, la Presidenta ingresará en un año electoral con más dinero del previsto.

Como en todas las ocasiones en que los Kirchner enviaron proyectos de presupuesto al Congreso, se subestiman groseramente las proyecciones de crecimiento e inflación y, en consecuencia, resultan muy bajos los aumentos de ingresos impositivos calculados.

Esas significativas sumas han sido, hasta el presente, asignadas mediante dos mecanismos. Cuando se trata de "mayores ingresos" por recaudación de tributos con asignación específica, el jefe de Gabinete los libera con la utilización de los superpoderes que le fueron delegados y retiene un porcentaje para ser entregado al Tesoro nacional. Cuando se trata de mayor recaudación por los tributos generales, el reparto es totalmente discrecional con un decreto de necesidad y urgencia.

Si en el pasado la estrategia oficial estuvo centrada en obtener superávits fiscales para pagar más deuda que la que vencía y así reducir la exposición y mantener un tipo de cambio alto y competitivo, hoy, para alentar un nivel de gasto insostenible, se pretende recurrir a un fuerte atraso cambiario y al endeudamiento en el exterior.

En efecto, las previsiones indican una mínima variación ascendente de la cotización del dólar que ni siquiera iguala la ridículamente baja previsión oficial de inflación.

La utilidad y la prioridad de muchas de las obras públicas no han sido debidamente debatidas en el Congreso. Por otro lado, se pretende que las deudas asumidas por el Estado en materia de obras públicas no sean computadas como tales, sino como préstamos hechos por el sector público como adelantos a proveedores y contratistas. Se trata de un modo de enmascarar las estadísticas públicas, al fingir que la deuda pública no crece, que no hay déficit y que se reduce o mantiene la relación entre deuda y producto bruto.

En el pasado reciente se utilizó ese mecanismo para hacer creer que no eran gastos los subsidios para mantener congelada buena parte de las tarifas eléctricas. Al sincerar esos datos se advierte que los ejercicios anteriores tuvieron menos superávit que el declarado y que la deuda siguió creciendo.

Con los mecanismos incluidos para financiar obras públicas en el proyecto 2011 pueden ocurrir cosas aún peores. Como lo que se pretende financiar son construcciones en manos privadas y ejecutadas por compañías muy ligadas al kirchnerismo, se puede instalar un colosal mecanismo de corrupción.

Las deudas, lo dice el proyecto, se tomarán en moneda extranjera. Los privados podrán gastar ese dinero sin controles estatales y sin licitaciones. Cualquier variación en el tipo de cambio hará que las compañías pidan, como mínimo, seguros de cotizaciones, lo que hará que licuen los pasivos, que serán asumidos por toda la sociedad.

El proyecto contempla una modificación de fondo en el orden legislativo vigente, al concederle al Ejecutivo facultades para endeudarse en los dos próximos ejercicios. Y, de hecho, recorta en un 40 por ciento el presupuesto destinado a la Corte Suprema de Justicia, como lo denunció el máximo tribunal.

También concede un enorme y discrecional poder al Ministerio de Planificación de alrededor de 26.000 millones de dólares. Sin contar las partidas asignadas a la cartera, el ministerio manejaría 104.000 millones de pesos por estos conceptos, cuando el gasto total previsto por el presupuesto no llega a los 373.000 millones. Sólo por deudas y avales que puede entregar a empresarios amigos, el ministro manejará el equivalente a uno de cada cuatro pesos del gasto presupuestado.

Otras intenciones, como la de volver a capturar una parte significativa de las reservas, pero esta vez para pagar deudas privadas, muestran que el Gobierno no quiere una política fiscal responsable y pretende continuar el gasto y la emisión monetaria, principal causa del incremento de la inflación. Un ejemplo es el artículo 69, que propone liberar por un año más a las provincias de las restricciones de la ley de responsabilidad fiscal.

El proyecto tiene, por si fuera poco, intenciones claramente anticonstitucionales, cuando pretende, en el artículo 73, que se faculte al Ejecutivo a crear un cargo más a los consumidores de gas natural para construir el Gasoducto Noroeste Argentina.

El Ejecutivo no sólo quiere que el Congreso le delegue la facultad de decidir el monto, la duración y las exenciones del tributo, lo cual claramente es delegación de facultades tributarias, contraria a la Constitución, sino que también pretende que los recursos los administre la controvertida y deficitaria empresa energética Enarsa, que pese a ser propiedad del Estado se maneja como si fuera privada, arrogándose el derecho a no ser sometida a la legislación de supervisión. Así, Enarsa podrá ejecutar el gasoducto sin necesidad de hacer licitaciones y sin limitaciones para adjudicar fondos a empresarios amigos del poder.

Otro cargo más se solicita para extender redes de gas, con iguales facultades extraordinarias. Se trata, una vez más, de la solicitud de superpoderes para continuar con la ruinosa política energética actual. El proyecto de presupuesto 2011 pide la creación de nuevos tributos, fondos para pagar importaciones de energía y combustibles, superpoderes y facultades administrativas especiales para financiar obras en manos de amigos.

Nuevamente, el Gobierno quiere imponer las medidas sin discutirlas y utilizar los fondos sin rendir cuentas.

Ecuador: ¿otra Honduras?

Por Hugo Latorre Fuenzalida


Fresca está la experiencia triste del caso Honduras cuando llega esta arremetida levantisca en Ecuador. Lo curioso de este problema es la coincidencia que se trata de países con dos presidentes claramente progresistas en esta región lationoamericana.

Ya Chávez tuvo lo suyo, cuando Carmona “el breve” se alzó junto a unos pocos empresarios y militares contra el presidente bolivariano, con resultados distintos a los del malogrado presidente Zelaya, quien fue definitivamente desbancado por los golpistas, envalentonados ante la postura timorata de los gobiernos democráticos y por la testarudez de EE.UU., que cree más en el unilateralismo derechista que en la pluralidad de opciones democráticas en su patio trasero.

Tanto Chávez como Correa han sido apoyados por sectores democráticos de las FF.AA., lo que habla de una perspectiva positiva para la Región, pues ello hace ver que el “gorilismo” reaccionario está siendo reemplazado por unas fuerzas armadas más sólidamente ancladas en los principios institucionalmente democráticos.

Honduras deberá aprender la lección y nunca más debe aceptarse livianamente a un presidente elegido en las circunstancias derivadas de un golpe de estado. No debe ser “blanqueado” en legitimidad por una elección citada por los golpistas a poco tiempo de efectuado ese golpe, pues se sabe que el temor de la población deslegitima cualquier resultado.

Indudablemente, en el caso de Ecuador, el levantamiento de la policía por temas reivindicativos, corresponde a una simple disculpa para destruir el sistema democrático y luego mañosamente transar nuevas elecciones con el aval de los que estén dispuestos a prestarse a un segundo capítulo de una infamia exitosa, como ya la tenemos instalada en Honduras.

Alegra esta reunión de urgencia de UNASUR; lo que queda por ver es qué efectividad tienen estas reuniones, porque también hubo UNASUR en el caso Honduras; también hubo OEA, en el caso Honduras y ninguno fue suficiente para enfrentar el cambio de postura del gobierno del Norte, quien presionó para legitimar una salida electoral, alentada desde el golpismo y desechar el forzamiento de una restitución del poder legítimo, que habría sido la única señal clara y contundente contra los golpistas agazapados de esta región tan acendradamente conspirativa.

Ahí están las consecuencias de una inconsecuencia; ahora en Ecuador los golpistas creen poder repetir con éxito lo que se permitió hacer y obrar en Honduras. Ya se abrió la compuerta, ahora es cosa de echar a correr nuevos caudales. Ese debe ser, necesariamente, el razonamiento de quienes repelen la democracia y más si esta democracia tiene perfume popular o social.

América Latina sigue en emergencia. Desde los golpismos de los 70 y la crisis enorme de los 80, esta Región no ha superado las crisis de desarrollo ni las de institucionalidad.

En el respiro democrático de los 90 y primera década del siglo XX, lo que se eliminó en tiranía política se ha reemplazado por una especie de despotismo económico. Somos una Región con grandes y crecientes sectores que se sumergen en la pobreza y la desesperanza; los gobiernos han sido desplazados a funciones subalternas y el Estado carece de recursos para cumplir una mínima función integradora.

La llamada “subsidariedad” del Estado, se ha convertido en una total inhabilitación del Estado, y en una sociedad moderna, un Estado paupérrimo, disminuido o precario constituye la mejor garantía de que se arriesga derivar a una sociedad autoritaria y antidemocrática. Los poderes que hoy manejan la economía no aceptan las interferencias odiosas de la política, menos si son populares o con sentido de responsabilidad nacional y social. Desean tener todas las manijas bajo su control, demás está decir que tienen poder y apoyos suficientes para intentar las aventuras golpistas. El usar las reivindicaciones económicas por parte de las policías o los militares es una excusa que ya la hemos conocido en Chile. Bien se sabe que el objetivo es otro, como lo ha denunciado el mismo presidente Rafael Correa de Ecuador.

A América Latina le queda mucho para ser una Región donde los países se soporten en Estados integradores, con institucionalidad insobornablemente democrática. Si no nos respetamos hacia nuestra interioridad, difícilmente nos respetarán quienes desde fuera nos prefieren débiles.

El comandante de la Policía de Ecuador, Freddy Martínez, dimitió a su cargo, dijo el viernes un portavoz de la entidad, tras una sublevación de efectivos de la fuerza pública que terminó en un violento enfrentamiento con militares.


El comandante de la Policía ecuatoriana, Freddy Martínez, dimitió a su cargo tras la rebelión de ayer.
Foto El Comercio de Quito