44.5%
Biden
44.8%
Trump
A pesar de estar inmerso en varios procesos penales, el republicano Donald Trump lidera ligeramente las encuestas presidenciales frente al demócrata Joe Biden en una carrera electoral muy reñida. Si las elecciones presidenciales se celebraran hoy, Trump tendría una ventaja de 0,3 puntos porcentuales sobre el actual presidente demócrata Joe Biden de acuerdo con el promedio de sondeos nacionales de Real Clear Politics (RCP).
A 194 días de las próximas elecciones generales, las encuestas reflejan una estrecha lucha por el voto popular entre Biden y el republicano Donald Trump. Este último se encuentra inmerso en la carrera electoral mientras enfrenta el primero de cuatro procesos penales pendientes, relacionados con pagos para asegurar el silencio de una actriz porno, fraude electoral o el manejo indebido de documentos clasificados.
Desde marzo del año pasado,
la brecha máxima en el promedio de encuestas entre ambos candidatos fue de 4,3
puntos porcentuales a favor de Trump en el mes de enero. Sin embargo, a medida
que las elecciones se acercan, esta diferencia ha disminuido notablemente. En
la actualidad, ambos candidatos se encuentran prácticamente empatados en las
encuestas de intención de voto. ¿Significa esto que a Trump le han afectado entonces los procesos que el Estado le sigue en su contra?
Las elecciones en el país no se deciden mediante el voto popular, sino a través de un proceso de sufragio indirecto: los candidatos deben conquistar cada estado para sumar electores y obtener al menos 270 votos del colegio electoral, de un total de 538.
Algunos territorios son más
decisivos que otros en el camino a la Casa Blanca. Tanto Biden como Trump
tienen respaldo electoral en estados considerados seguros para sus respectivos
partidos, como California para los demócratas o Alabama para los republicanos.
Por esta razón, concentran sus esfuerzos en obtener la victoria en estados
disputados, como Florida o Michigan.
Uno de los problemas que está pesando en esta elección es la edad de ambos candidatos: Joe Biden 81 años y Donald Trump 77 años, detalle importante en esta elección, lo que podría en este caso favorecer el ex presidente Trump.
Sin embargo hay temas político-económicos que los unen a ambos, como es el de China. Desde que el ex presidente estadounidense Barack Obama dijo en 2011 que “Estados Unidos es una potencia del Pacífico, y estamos aquí para quedarnos (...) Que no quepa ninguna duda: en el Asia-Pacífico del siglo XXI, Estados Unidos está en todas partes”. Trump, como presidente entre 2017 y 2021 "se agarro" de esas palabras para colocar el tema chino en el centro de su entonces campaña y de la polémica en general.
La dinámica económica, financiera y comercial global post Guerra Fría había coincidido a plenitud con la apertura capitalista de China, que le facilitó su integración en los organismos multilaterales del “orden liberal internacional” y la hizo protagonista clave en la superación de la crisis financiera de 2008, desde el G20.
El presidente Hu Jintao visitó Estados Unidos en 2006 y recibió al demócrata Barack Obama en 2009. Pero muy pronto la intención de Washington de incentivar una apertura política en China a través de la economía se probó frustrada. Lo que se verificaba era la irrupción de una potencia emergente. De un nuevo rival de fuste, de una renovada amenaza a su hegemonía global. La diplomacia estadounidense giró entonces alarmada su periscopio otra vez al Este, pero ya no a Moscú sino a Beijing.
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